Buen resumen del tema. Recuerdo que lo leí hace años, luego comencé a encontrar más y más pruebas de que la expulsión es una medida contraria a la Biblia.
¿Cuántas expulsiones se narran en la Biblia? Solamente una, la del hombre que tenía a la mujer de su padre. ¿Cuánto tiempo duró expulsado? Menos de un año, unos seis meses.
¿Y qué decir de la ilustración del hijo pródigo? El joven vivió una vida disoluta, y aún así su padre corrió a abrazarlo en cuanto lo vio, no esperó a que los ancianos se reunieran con él para mirar si estaba arrepentido de verdad...
Hay mucho que decir sobre el tema...
La nueva versión del libro de los ancianos, el Pastoreen, dice sobre el tema que abordas:
ks 10:6 escribió:6. Si se sabe que algunos miembros de la congregación tienen trato indebido con parientes expulsados o desasociados que no viven en la misma casa, los ancianos deben aconsejarlos y razonar con ellos utilizando las Escrituras. Podrán valerse de la información contenida en el libro “Amor de Dios”, páginas 207 a 209; La Atalaya del 15 de abril de 1988, páginas 26 a 31, o el artículo “Demostremos lealtad cristiana cuando se expulsa a un pariente”, de Nuestro Ministerio del Reino de agosto de 2002. Si es obvio que un cristiano está traspasando el espíritu de este mandato y no hace caso del consejo, no podrá recibir privilegios en la congregación, pues estos solo se conceden a hermanos ejemplares. No se tomarán medidas judiciales a menos que el hermano se empeñe en tener compañía espiritual con su pariente o critique abiertamente la expulsión.
Gracias por compartir con nosotros tus artículos, muy útiles.