13 May, 2017, 11:17 PM
Excelente reflexión Moebius, por el formato parece procedente de alguna página, ¿tienes la fuente?
Se refleja la realidad de vivir dentro de una secta. Finalizando el libro sobre el control mental de las sectas, Steve Hassan hace algunas reflexiones similares.
Cuando llegué a esa parte del libro y me vi reflejado comprendí por primera vez que había vivido (perdido) toda mi vida hasta ese momento dentro de una secta.
Algunos apartes:
Y saben, queridos amigos míos, ¿qué es lo más irónico de este asunto? Que el estudio de La Atalaya de este fin de semana habla de tomar buenas decisiones. La segunda pregunta de repaso es: "¿Por qué no debemos dejar que otros tomen decisiones por nosotros?"
https://www.jw.org/es/publicaciones/revi...ecisiones/
Se refleja la realidad de vivir dentro de una secta. Finalizando el libro sobre el control mental de las sectas, Steve Hassan hace algunas reflexiones similares.
Cuando llegué a esa parte del libro y me vi reflejado comprendí por primera vez que había vivido (perdido) toda mi vida hasta ese momento dentro de una secta.
Algunos apartes:
Combatiendo el control mental de las sectas, por Steve Hassan escribió:Otro problema que se presenta con frecuencia es una tendencia irresistible a continuar dependiendo de otras personas para que les orienten y les digan lo que tienen que hacer. En los grupos donde los miembros viven en comunidad, la mayoría de las decisiones son tomadas por los líderes. A los miembros se les pide que no piensen y que sean obedientes. Esta forma de dependencia fomenta la disminución de la autoestima y retarda el deseo y la capacidad de desarrollo individual.
Una forma específica que adopta este dependencia es la dificultad para tomar decisiones. He trabajado con personas que no sabían qué querían para comer, con qué ropas vestirse, qué libro debían leer, qué película ver, o qué debían hacer con respecto a su educación o empleo. A todos los que han tenido que pedir permiso a sus superiores para hacer las cosas más simples, verse de pronto lanzados al mundo de las responsabilidades personales les puede resultar muy complicado.
[...]
Cronológicamente, la persona tiene 30 años. Psicológicamente, todavía se siente en los 18. Sus amigos de la escuela ya tienen buenos empleos; muchos se han casado, algunos tienen hijos; otros se han comprado su casa y tienen uno o dos automóviles. A los 30, todavía es un inexperto en materia de mujeres y ha estado fuera de contacto con los hechos actuales y con lo que ocurrió en el mundo durante más de diez años. En una fiesta, no tiene mucho de qué hablar, a menos que hable de su vida en la secta, lo que puede aumentar todavía más la sensación de estar metido en una pecera.
Esta persona a menudo siente una aguda sensación de tener que recuperar el tiempo perdido. Esta presión puede ser muy estresante. La realidad es que esta persona ha estado apartada del cuerpo social durante doce años. Debe aprender a que debe tomarse su tiempo para curarse, madurar y desarrollarse. Tiene que reconocer que él tiene su propio camino, su propio tiempo, y que se debe ocupar de sus necesidades y aprender a no compararse con las otras personas.
Y saben, queridos amigos míos, ¿qué es lo más irónico de este asunto? Que el estudio de La Atalaya de este fin de semana habla de tomar buenas decisiones. La segunda pregunta de repaso es: "¿Por qué no debemos dejar que otros tomen decisiones por nosotros?"
https://www.jw.org/es/publicaciones/revi...ecisiones/
Ubi dubium ibi libertas (Donde hay dudas hay libertad)
"La verdad nunca teme ser examinada, la mentira sí."