14 Jul, 2017, 10:42 AM
Cuando oía cantar a alguna gente en algunas iglesias o grupos que se reunían en casas, alabanzas alegres y a veces con palmas decía: "yo jamás cantaría así a Jehová! que desorden!". Estaba tan acostumbrada a las "melodías" tan monótonas de la organización, que asumen que todos son amantes de ese mismo género de música e inconscientemente hacen creer que esa es la única música que Dios aceptaría.
Pero luego de conocer de primera mano la pasión con la que estas personas cantan de todo corazón a su Dios, una pasión que nunca vi ni por asomo en ninguna de las miles de reuniones en el salón del reino a las que asistí, talvez en otras congregaciones pero no en las que yo estuve, y luego de experimentar yo misma algo muy "extraño", diferente y especial al cantar estas alabanzas, yo misma no pude parar. Algo que nunca me esperé vivir y por supuesto que como testigo decía dentro de mí que NUNCA haría.
Aquí en mi país decimos que "Todos los nunca, se llegan"
Pero luego de conocer de primera mano la pasión con la que estas personas cantan de todo corazón a su Dios, una pasión que nunca vi ni por asomo en ninguna de las miles de reuniones en el salón del reino a las que asistí, talvez en otras congregaciones pero no en las que yo estuve, y luego de experimentar yo misma algo muy "extraño", diferente y especial al cantar estas alabanzas, yo misma no pude parar. Algo que nunca me esperé vivir y por supuesto que como testigo decía dentro de mí que NUNCA haría.
Aquí en mi país decimos que "Todos los nunca, se llegan"