29 Jun, 2024, 01:59 PM
Esto es algo que me ha deprimido mucho desde bien pequeño, y ahora que soy adulto y más viejo, lo llevo mejor que cuando aún era un moco y tenía toda la vida por delante.
Lo curioso es que teniendo la esperanza del paraíso y siendo tan inocente para algunas cosas, creo que jamás acabé de creerme lo de la vida eterna, y menos aún un paraíso. Y aquí destaco mucho más que el tiempo, la presencia del bien y del mal que has mencionado.
¿Cómo apreciar la alegría sin la tristeza? Incluso en la tristeza hay un sabor, una textura, una sed de ti mismo ante el mundo. Si las cosas malas desaparecen, si quitas la oscuridad... ¿Viviríamos en un constante estado de éxtasis antinatural o cómo va eso? No tiene demasiado sentido, pese a que nadie quiere estar triste conscientemente.
Incluso pensaba cosas como, "si vivimos en un precioso jardín, con sus árboles, sus montes... ¿nunca podríamos caernos de un peñasco y hacernos daño"? No sabía hasta qué punto se aplicaba la lógica en todo esto. Por ejemplo, un cuchillo... No lo usaríamos para matar animales, y menos para hacer daño a otra persona, pero seguiríamos necesitándolo para cortar un tomate. Y si el tomate es susceptible de ser atravesado por el cuchillo, ¿qué impide que no se clave en nosotros? ¿Nuestra perfección para evitar un accidente así y/o la propia voluntad? Pero el mal seguiría existiendo en ese cuchillo sólo con desearlo. En estas cosas pensaba mucho también.
Aunque tampoco sé el grado de fantasía que haya recibido cada uno en su aprendizaje como Testigo...
Tampoco creo que una vida eterna tuviera que ser necesariamente aburrida si es una buena vida, pero al mismo tiempo pienso que es triste, porque yo recuerdo (más de lo que me gustaría) momentos buenos con seres que en su día me fueron queridos, y que aún viven pero no están. Y pienso a menudo, ¿a dónde va todo eso? ¿Para qué lo vivimos? Es como si una película que te gustase muchísimo no pudieras volver a verla nunca más. A veces no entiendo el sentido del propio tiempo, de vivir hacia adelante constantemente.
Sé que suena muy extraño lo que digo, pero a veces imagino la vida como eso, una película o un libro que, una vez llegado a su final, tuviera que conectar en bucle con el principio. ¿Imagináis morir y volver a nacer siendo la misma persona, sin recordar nada, y repitiendo la misma vida en una grabación constante de la que creemos tener dominio a tiempo real?
Creo que estas locuras sólo me atrevo a escribirlas por aquí... Jajaja...
La verdad es que la vida, eterna o no, sigue siendo un misterio...
Lo curioso es que teniendo la esperanza del paraíso y siendo tan inocente para algunas cosas, creo que jamás acabé de creerme lo de la vida eterna, y menos aún un paraíso. Y aquí destaco mucho más que el tiempo, la presencia del bien y del mal que has mencionado.
¿Cómo apreciar la alegría sin la tristeza? Incluso en la tristeza hay un sabor, una textura, una sed de ti mismo ante el mundo. Si las cosas malas desaparecen, si quitas la oscuridad... ¿Viviríamos en un constante estado de éxtasis antinatural o cómo va eso? No tiene demasiado sentido, pese a que nadie quiere estar triste conscientemente.
Incluso pensaba cosas como, "si vivimos en un precioso jardín, con sus árboles, sus montes... ¿nunca podríamos caernos de un peñasco y hacernos daño"? No sabía hasta qué punto se aplicaba la lógica en todo esto. Por ejemplo, un cuchillo... No lo usaríamos para matar animales, y menos para hacer daño a otra persona, pero seguiríamos necesitándolo para cortar un tomate. Y si el tomate es susceptible de ser atravesado por el cuchillo, ¿qué impide que no se clave en nosotros? ¿Nuestra perfección para evitar un accidente así y/o la propia voluntad? Pero el mal seguiría existiendo en ese cuchillo sólo con desearlo. En estas cosas pensaba mucho también.
Aunque tampoco sé el grado de fantasía que haya recibido cada uno en su aprendizaje como Testigo...
Tampoco creo que una vida eterna tuviera que ser necesariamente aburrida si es una buena vida, pero al mismo tiempo pienso que es triste, porque yo recuerdo (más de lo que me gustaría) momentos buenos con seres que en su día me fueron queridos, y que aún viven pero no están. Y pienso a menudo, ¿a dónde va todo eso? ¿Para qué lo vivimos? Es como si una película que te gustase muchísimo no pudieras volver a verla nunca más. A veces no entiendo el sentido del propio tiempo, de vivir hacia adelante constantemente.
Sé que suena muy extraño lo que digo, pero a veces imagino la vida como eso, una película o un libro que, una vez llegado a su final, tuviera que conectar en bucle con el principio. ¿Imagináis morir y volver a nacer siendo la misma persona, sin recordar nada, y repitiendo la misma vida en una grabación constante de la que creemos tener dominio a tiempo real?
Creo que estas locuras sólo me atrevo a escribirlas por aquí... Jajaja...
La verdad es que la vida, eterna o no, sigue siendo un misterio...