Testigos de Jehová acusados de maltrato de abuso en Montana
Por MATT VOLZ
19 de septiembre de 2018
HELENA, Mont. (AP) - Dos mujeres que dicen haber sufrido abusos sexuales durante su niñez alegaron que los Testigos de Jehová no informaron a su abusador a las autoridades de Montana y lo castigaron internamente al expulsarlo de la congregación hasta que se arrepintió el año siguiente.
Un juicio comienza el lunes en la pequeña ciudad de Thompson Falls por una de las docenas de demandas presentadas a nivel nacional en la última década por reclamos de abuso sexual infantil en congregaciones de testigos de Jehová. En todo el mundo, ha habido más denuncias de mala administración y encubrimiento de abusos sexuales por parte del clero y miembros de los testigos de Jehová, incluidos casos en Canadá, Australia y el Reino Unido.
"Parece ser un problema generalizado dentro de los testigos de Jehová", dijo Devin Storey, un abogado cuya firma de abogados de San Diego ha manejado alrededor de tres docenas de demandas por abuso sexual contra la organización religiosa cristiana. "Se informa menos de lo que debería ser".
Funcionarios de la Sede Mundial de los Testigos de Jehová no hicieron un comentario inmediato el miércoles. Una política publicada en su sitio web dice que aborrece el abuso infantil y lo ve como un crimen.
"Los ancianos no protegen a los perpetradores de abuso infantil de las autoridades", dice la política.
La organización religiosa con sede en Nueva York tiene 8,5 millones de miembros y 120,000 congregaciones en todo el mundo. El número de demandas por abuso aumentó casi al mismo tiempo que las denuncias similares de abuso y encubrimiento dentro de la iglesia católica, pero los casos de los testigos de Jehová no han recibido la misma atención nacional.
El juicio de Montana involucra a dos mujeres, ahora de 32 y 21 años, que están demandando a la organización nacional de testigos de Jehová y su congregación de Thompson Falls. Una mujer alega que un miembro de su familia abusó de ella y su hermano en la década de 1990.
El abuso continuó a mediados de la década de 2000 con la segunda mujer, la primera sobrina de la mujer, después de que los ancianos de la congregación expulsaron al abusador de la congregación en 2004 y lo reinstalaron al año siguiente, según la demanda.
Las mujeres dicen que las organizaciones locales y nacionales fueron negligentes y violaron una ley de Montana que les exige denunciar el abuso a las autoridades externas. Están buscando una cantidad no especificada en daños y perjuicios.
Su abogado, Jim Molloy, se negó a hacer comentarios el miércoles.
Los abogados de los testigos de Jehová no respondieron a los mensajes que dejaron por teléfono y correo electrónico. En las presentaciones ante el tribunal, no niegan que ocurrió el abuso, pero dicen que la ley de Montana exime a los ancianos de informar "procedimientos eclesiásticos internos sobre el grave pecado de un miembro de una congregación".
La iglesia también sostiene que la organización nacional no es responsable por las acciones de los ancianos de Thompson Falls y que ha pasado demasiado tiempo para que las mujeres demanden.
El Tribunal Supremo del estado rechazó esta semana la solicitud de los Testigos de Jehová de retrasar el juicio y hacerse cargo del caso.
Ambas partes reconocen que cuando una persona es acusada de abuso sexual, se requiere que los ancianos en una congregación de testigos de Jehová se comuniquen primero con el departamento legal de la sede para determinar el siguiente paso.
La política de la organización dice que instruirá a los ancianos a informar el asunto si un menor todavía está en peligro de abuso o si existe otro motivo válido. Storey, el abogado de San Diego, dijo que se trata de un nuevo cambio de política.
De lo contrario, los ancianos de los testigos de Jehová se reúnen como un comité judicial para investigar "la conducta pecaminosa ... y decidir si el pecador se arrepiente delante de Dios", según una descripción del proceso proporcionado por los testigos de Jehová en los registros judiciales.
Los infractores que no se arrepienten son expulsados, y se mantiene una estricta confidencialidad, de acuerdo con los documentos presentados.
En este caso, la congregación no estaba obligada a informar a las autoridades, según la abogada de los testigos de Jehová, Kathleen DeSoto.
"La Constitución prohíbe a la corte contradecir a una organización religiosa en cuestiones de creencias religiosas, incluyendo el derecho canónico, la doctrina de la iglesia y la práctica establecida de la iglesia", escribió en su argumento al Tribunal Supremo de Montana.
Storey dijo que los testigos de Jehová tienen una visión muy amplia de las leyes que protegen las discusiones hechas en confesión u otras discusiones entre el clero y un miembro de la congregación, más amplia de lo que permite la ley.
La organización parece estar tratando de mejorar, pero ha mantenido políticas como la regla de dos testigos, que dice que no se tomará ninguna medida contra un miembro de la iglesia sin el testimonio de al menos dos testigos, dijo.
"Al mantener ese aspecto particular de su política, será difícil para ellos erradicar el problema", dijo Storey.
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