Esta comunidad utiliza cookies
Esta comunidad utiliza cookies para almacenar información de ingreso si eres forista, y tu última visita si no lo eres. Las cookies son pequeños textos almacenados en su computadora; dichas cookies son puestas por este sitio y no posan como riesgo de seguridad. Las cookies rastrean tópicos específicos que usted haya leído. Por favor confirme si acepta o rechaza que estas cookies sean almacenadas.

Una cookie se almacenará en su navegador para prevenir que este aviso salga nuevamente. Usted podrá cambiar este ajuste utilizando el enlace a pie de página.

Copyright authors please see our disclaimer. (March 19, 2021)

Calificación:
  • 0 voto(s) - 0 Media
  • 1
  • 2
  • 3
  • 4
  • 5

Se notan los nuevos cambios y las nuevas luces
#1

Fui testigo de Jehová hace ya muchos años. Desde entonces, jamás recibí una visita ni una llamada. Tampoco es que me importara demasiado. Aun así, siempre he sido cordial: cuando me topo con ellos en la calle los saludo con una sonrisa, quizá con un punto de descaro.

Hace un par de meses vinieron a predicar a mi casa. No los conocía, no eran de “mi tiempo”. Eran dos: un hombre mayor, rondando los 55, acompañado de un joven de unos 27. Apenas comenzaron con el discurso, los interrumpí en tono gracioso y les solté: “No pueden hablar conmigo, sería un pecado”. El adulto, muy fresco, me respondió: “Oh, no hay problema, yo soy anciano. No hay pecado. Queremos saber cuándo podemos visitarte”.

Yo, con mi estilo, les di la vuelta diciendo que tenía muchas responsabilidades, poco tiempo, y que era curioso cómo ahora podían hablar con expulsados. Les comenté que, al parecer, las “nuevas luces” cambiaban todo… incluso lo de poder llevar barba. Ellos no parecieron incómodos con mi ironía, lo cual me sorprendió.

Al poco tiempo, regresé de trabajar y me encontré con una nota en la puerta que decía: “Te estamos buscando”, acompañada de un número de teléfono. Obviamente no iba a llamar, pero la insistencia me resultó peculiar. Y no acabó ahí: otro día, mientras hacía compras, me abordaron de nuevo. (¡Me salieron medio acosadores!) Me preguntaron si había visto la nota y cuál había sido mi impresión. Les respondí que sí, pero que quería saber la verdadera intención detrás de todo. El hombre me explicó que se trataba de “ver si quiero volver a la congregación y organizar una visita para hablar de eso”.

Yo fui claro: “La verdad no estoy interesado en volver”. A lo que él, con una sonrisa inquebrantable, contestó: “De todas formas podríamos visitarte”. Yo le dije: “Si piensas que resultará en algo fructífero, eres bienvenido a conversar conmigo”. Y ahí vino lo surrealista: me pidió que anotara su número, insistió en que le diera el mío… y poco después me envió una invitación para una asamblea, añadiendo: “Luego de la asamblea cuadramos una visita”.

¿Estoy loco, me cambié de realidad o por qué tanta insistencia? ¡Dios! Ya parece una campaña de reclutamiento obsesiva.


"Es al caer en el abismo cuando recuperamos los tesoros de la vida" -JOSEPH CAMPBELL 
The bible is glitchtastic! Sorry for the spoiler.

Lee la traducción que realicé al libro "Nueva Luz" documenta decenas de cambios en las doctrinas de los testigos.


[+] 3 usuarios dieron MeGusta Réquiem.
Responder
#2

(Ayer, 02:21 PM)Réquiem escribió:  Fui testigo de Jehová hace ya muchos años. Desde entonces, jamás recibí una visita ni una llamada. Tampoco es que me importara demasiado. Aun así, siempre he sido cordial: cuando me topo con ellos en la calle los saludo con una sonrisa, quizá con un punto de descaro.

Hace un par de meses vinieron a predicar a mi casa. No los conocía, no eran de “mi tiempo”. Eran dos: un hombre mayor, rondando los 55, acompañado de un joven de unos 27. Apenas comenzaron con el discurso, los interrumpí en tono gracioso y les solté: “No pueden hablar conmigo, sería un pecado”. El adulto, muy fresco, me respondió: “Oh, no hay problema, yo soy anciano. No hay pecado. Queremos saber cuándo podemos visitarte”.

Yo, con mi estilo, les di la vuelta diciendo que tenía muchas responsabilidades, poco tiempo, y que era curioso cómo ahora podían hablar con expulsados. Les comenté que, al parecer, las “nuevas luces” cambiaban todo… incluso lo de poder llevar barba. Ellos no parecieron incómodos con mi ironía, lo cual me sorprendió.

Al poco tiempo, regresé de trabajar y me encontré con una nota en la puerta que decía: “Te estamos buscando”, acompañada de un número de teléfono. Obviamente no iba a llamar, pero la insistencia me resultó peculiar. Y no acabó ahí: otro día, mientras hacía compras, me abordaron de nuevo. (¡Me salieron medio acosadores!) Me preguntaron si había visto la nota y cuál había sido mi impresión. Les respondí que sí, pero que quería saber la verdadera intención detrás de todo. El hombre me explicó que se trataba de “ver si quiero volver a la congregación y organizar una visita para hablar de eso”.

Yo fui claro: “La verdad no estoy interesado en volver”. A lo que él, con una sonrisa inquebrantable, contestó: “De todas formas podríamos visitarte”. Yo le dije: “Si piensas que resultará en algo fructífero, eres bienvenido a conversar conmigo”. Y ahí vino lo surrealista: me pidió que anotara su número, insistió en que le diera el mío… y poco después me envió una invitación para una asamblea, añadiendo: “Luego de la asamblea cuadramos una visita”.

¿Estoy loco, me cambié de realidad o por qué tanta insistencia? ¡Dios! Ya parece una campaña de reclutamiento obsesiva.

O tal vez le resultas atractivo físicamente, no hay que descartar ninguna posibilidad.

charlesfiascorussell@gmail.com
[+] 4 usuarios dieron MeGusta Anciano Señalado.
Responder
#3

¿Dios estoy siendo tan inocente? jajaja
_______________________________


"Es al caer en el abismo cuando recuperamos los tesoros de la vida" -JOSEPH CAMPBELL 
The bible is glitchtastic! Sorry for the spoiler.

Lee la traducción que realicé al libro "Nueva Luz" documenta decenas de cambios en las doctrinas de los testigos.


[+] 1 usuario dio MeGusta Réquiem.
Responder
#4

Pues todo dependerá de lo que quieras hacer. Si quieres seguir manteniendo las charlas para abrirles los ojos... o si quieres seguir perdiendo el tiempo con ellos y ellos contigo.

Marcos 7:7-8: De nada sirve que me estén adorando, porque enseñan doctrinas que son mandatos de hombres’. Ustedes dejan de lado los mandamientos de Dios y se aferran a las tradiciones de los hombres”.
[+] 1 usuario dio MeGusta elohim2002.
Responder
#5

Leyéndote parece que no necesitas confirmar nada de tu posición de extj.. Haz lo que menos te incomode, si disfrutas ver la cara que ponen ante tus objeciones........te volverán a expulsar.
Parece como si hubiesen agotado las posibilidades de sacar proselitos.
Lo que me ha sorprendido es la respuesta
"“Oh, no hay problema, yo soy anciano. No hay pecado." ¿No hay pecado porque soy anciano? o ¿tengo el conocimiento suficiente para saber como obrar?.

“La luz excesiva es la mayor oscuridad… " Peer Gynt de Henrik Ibsen
Responder
#6

(Ayer, 02:21 PM)Réquiem escribió:  Fui testigo de Jehová hace ya muchos años. Desde entonces, jamás recibí una visita ni una llamada. Tampoco es que me importara demasiado. Aun así, siempre he sido cordial: cuando me topo con ellos en la calle los saludo con una sonrisa, quizá con un punto de descaro.

Hace un par de meses vinieron a predicar a mi casa. No los conocía, no eran de “mi tiempo”. Eran dos: un hombre mayor, rondando los 55, acompañado de un joven de unos 27. Apenas comenzaron con el discurso, los interrumpí en tono gracioso y les solté: “No pueden hablar conmigo, sería un pecado”. El adulto, muy fresco, me respondió: “Oh, no hay problema, yo soy anciano. No hay pecado. Queremos saber cuándo podemos visitarte”.

Yo, con mi estilo, les di la vuelta diciendo que tenía muchas responsabilidades, poco tiempo, y que era curioso cómo ahora podían hablar con expulsados. Les comenté que, al parecer, las “nuevas luces” cambiaban todo… incluso lo de poder llevar barba. Ellos no parecieron incómodos con mi ironía, lo cual me sorprendió.

Al poco tiempo, regresé de trabajar y me encontré con una nota en la puerta que decía: “Te estamos buscando”, acompañada de un número de teléfono. Obviamente no iba a llamar, pero la insistencia me resultó peculiar. Y no acabó ahí: otro día, mientras hacía compras, me abordaron de nuevo. (¡Me salieron medio acosadores!) Me preguntaron si había visto la nota y cuál había sido mi impresión. Les respondí que sí, pero que quería saber la verdadera intención detrás de todo. El hombre me explicó que se trataba de “ver si quiero volver a la congregación y organizar una visita para hablar de eso”.

Yo fui claro: “La verdad no estoy interesado en volver”. A lo que él, con una sonrisa inquebrantable, contestó: “De todas formas podríamos visitarte”. Yo le dije: “Si piensas que resultará en algo fructífero, eres bienvenido a conversar conmigo”. Y ahí vino lo surrealista: me pidió que anotara su número, insistió en que le diera el mío… y poco después me envió una invitación para una asamblea, añadiendo: “Luego de la asamblea cuadramos una visita”.

¿Estoy loco, me cambié de realidad o por qué tanta insistencia? ¡Dios! Ya parece una campaña de reclutamiento obsesiva.

Si mañana la watchtower anunciara que apartir de ahora celebraremos navidad, creeme. Los salones del reino estaran llenos de luces decorativas y un gran arbol de navidad.

Honestamente, siento lastima por los que siguen adoctrinados. Se les ha hecho creer que el cuerpo gobernantes es como si Dios mismo te estuviera hablando. Asi que los mas fieles no van a dudar ni un segundo.

Este hermano (anciano) quizas ya se convencio que Jehova les acaban de revelar que los expulsados no son tan malos como se nos ha hecho creer. y que Dios quiere que vayamos a buscarlos.

Se sincero, dile que no te interesa, pero tampoco seas tan brusco. Se que lo hacen de corazon, sin embargo estan siendo manipulados. Ojala algun dia abran los ojos
Responder


Posibles hilos similares…
Hilo / Autor Respuestas Vistas Último mensaje
Último mensaje por elohim2002
27 Sep, 2024, 10:29 AM

Salto de foro:


Usuarios navegando en este hilo: 3 invitado(s)