[Demas]

Después de escucharlo y pedirle que saliera, nos pusimos a "deliberar",  ya a solas le dije a mis coancianos que no había ninguna razón ni base bíblica para el comité,  que bastaba sólo dos ancianos para que hablarán con él y le dieran consejo para llevar un noviazgo honorable. Fue una discusión como de dos horas,  más que el comité del joven.

Nuevamente me dejé tontamente convencer por sus argumentos.  Mi único logro fue que se reclasificara uno de los pecados: de fornicación a pornografía.
La base,  una nota del libro Mantengase en el amor de Dios: Con el término pornografía nos referimos a la representación (con imágenes, textos o voces) de escenas eróticas destinadas a excitar. Puede ir desde la foto de una persona en pose lasciva hasta la exhibición de los actos más aberrantes entre dos o más individuos..

Ahí me di cuenta que pesa más una amistad que la justicia de Dios. (Más tarde yo mismo utilize este recurso para ayudar a un amigo). Nuevamente vi a Goliat frente a mí,  y recordé que es bueno tener cerca a los amigos,  pero más a los enemigos.  Así que apoye su decisión: Expulsión

El joven, nuestro hijo espiritual, era un peligro para las jovencitas,  no había razón para exponerlas.

Me siento avergonzado y siento asco de mi mismo,  es una aguja clavada en mi carne que me hace mucho daño.  

Después de su expulsión le llame,  le dije que viniera a verme,  le pedí que cuando necesitara hablar con alguien me buscara, y así lo hizo,  cada semana platicabamos y/o comíamos algo,  claro,  a espaldas de mis coancianos (que cobarde fui).  

A los tres meses le sugerí que metiera su carta de readmisión,  no fue aceptada.

Nuevamente a los 6 meses,  el mismo resultado,  por ultimo cerca de los dos años fue readmitido.

Ya no fui parte del comité de readmisión, se me hizo a un lado por mi proceder en los juicios.

Y aunque a la fecha lo considero mi amigo, no he tenido el valor de pedirle perdón y decirle que se cometió una injusticia con él. Durante varios meses no había día que no le pidiera perdón a Dios por mi proceder y el de mis coancianos. Y aun ahora de repente lo sigo haciendo.

No se si comprendan y entiendan mi proceder, solo deseo que me perdonen por lo que acabo de relatar.