[El Zelote]

Parte 16: Conociendo la acusación

Apodaca, México

En aquel año 2013 a mediados de julio yo trabaja en una empresa microfinanciera, me asignaban visitar ciertos domicilios y revisar la documentación de los clientes para otorgar créditos grupales. La semana siguiente a la asamblea de circuito el día viernes, mi supervisora me pidió visitar ciertos grupos que no me correspondían. Llegué a las colonias Pueblo Nuevo, San Isidro y Millenium Residencial, hacía calor y para mitigar la sed entré a una tienda de abarrotes ubicada en una esquina y compré un jugo de naranja, allí me encontré con un hermano de la congregación Los Tréboles que en aquellos años siempre servía de acomodador y era siervo ministerial, casado con una joven delgada, morena y muy bonita.

Afuera de la tienda había una banca a la sombra de un árbol, cruzando la calle en una esquina se encuentra un Jardín de Niños o un Kinder como popularmente se le conoce, revisé en Google Maps y la tienda al día de hoy está pintada de color amarillo con azul y con figuras del equipo de fútbol Tigres UANL  y la misma banca sigue allí bajo el árbol.

Comenzamos a platicar cosas típicas de ¿cómo has estado?, ¿qué tal va tu congregación? ¿ya readmitieron a fulanito? ¿pepito ya es ministerial? Y cosas por el estilo. De repente me dijo: "Tony, quiero preguntarte algo y espero no te vayas a ofender, te lo digo con todo el respeto que te mereces?". Yo le dije que no había ningún problema y añadió: "¿Tú eres quién le hablaba a las hermanas de las cajitas por teléfono?".

 esas fueron mis reacciones y yo no podía creerlo, pensé incluso que sería mejor que me tragara la tierra, le dije que NOOOO y le exigí una explicación. Luego él continuó: "Mira, a mi esposa esa persona le habló a su celular y ella pensó que eras tú, luego de la reunión en el salón de Los Ébanos las hermanas de las congregaciones de la zona; ya sabes, Los Tréboles, Pueblo Nuevo, Pueblo Nuevo Centro, Pueblo Nuevo Sur y Paseo de las Flores, comenzaron a sospechar de ti. Las razones de las hermanas es que de todos los varones capitanes y auxiliares del Departamento de Contabilidad tú eres el único soltero, todos están casados menos tú.

En mis adentro me indigné y sentí como si me hubiera escupido en la cara . Él continuó hablando: "además, lo que nos hizo sospechar incluso a los esposos de ti es que la semana pasada en la asamblea de circuito ya no estuviste en contabilidad, serviste de acomodador y te tocó en los pasillos muy cerca de las hermanas de cajitas".

Llegó mi turno de defenderme y le aclaré que no tuve NADA que ver con esas llamadas indiscretas, le informé el resultado final de que ya se había dado con el responsable y que era un auxiliar de capitán que vive en el municipio de Escobedo, que era del circuito 16 y es soltero, pero incluso yo al día de hoy desconozco la verdadera identidad de tan nefasto personaje. Mi ex coordinador de la congregación Zaragoza y otros ancianos de la congregación Prados de Los Pinos son quienes conocieron a este tipo; pero, al igual que a los pedófilos procuran darle vuelta al asunto y hacer que no pasó nada simplemente ya no hablando sobre eso.

El pasar de los años:

Ya han pasado 6 años desde aquel suceso y aquí en Apodaca quienes lo recuerdan; imaginan mi rostro, para proteger a ese depravado acosador de esposas casadas y menores de edad, a estos tipo más fácil me echaron la culpa y sabiendo lo que la gente cuenta simple y sencillamente no dijeron NADA. Un chisme o una suposición manchó mi reputación como varón nombrado, con el tiempo te das cuenta que ser Testigo de Jehová es lo peor del mundo, mi único defecto era que aún no me había casado y que de todos los capitanes era el único soltero, en la congregación Zaragoza- Apodaca eramos 11 siervos nombrados, 5 ancianos y 6 siervos ministeriales, yo como el único soltero de los ministeriales 1 era 3 años menor que yo. En ese entonces yo tenía 23 años ahora tengo 29 en 2 meses cumpliré mis 30, no era de mi interés el matrimonio porque deseaba tener más tiempo para dedicarme a promover los intereses del Reino y adorar a Jehová, considero que desperdicié valiosos años de mi vida predicando de puerta en puerta la mentira de un paraíso en la tierra.