Como bien comentó
OvejaNegra42 cuando un matrimonio testigo de Jehová tiene un problema inmediatamente acude con los ancianos, quien en vez de ayudarlo les da tremendo bajón emocional y solo complica las cosas. Difícilmente una persona que no tiene una formación profesional adecuada puede ayudar en ese ámbito, de hecho es bien sabido que incluso dan "consejo"en aspectos íntimos de la pareja.
Entonces si estamos pasando por una ruptura definitiva, debemos de acudir por ayuda profesional.
Hay una serie de etapas por las que tenemos que pasar para cerrar ese ciclo de nuestra vida e iniciar otro:
¿Cuál es la mejor forma de superar una ruptura?
¿Cómo superar una ruptura inesperada y dolorosa? No hay trucos mágicos para conseguir que el dolor desaparezca rápidamente, pero podemos seguir algunas pautas.
Deja que el dolor fluya. Hay que darse un tiempo para experimentar el dolor, llorar, escuchar canciones tristes, comer helado y chocolate, y llorar otro poco más. Pero después de eso hay que volver a salir a la calle y recuperar la rutina y la vida normal, aunque cueste. Sino expresamos la tristeza que sentimos, ésta se quedará atascada y no podremos avanzar en el duelo. Muchas veces nuestros amigos o familia nos insisten en que nos animemos y no lloremos. Está claro que nos dan estos consejos con la mejor de sus intenciones, porque no quieren vernos tristes. Sin embargo, es importante tener claro que es una parte del duelo y tenemos que transitar por ella.
Apóyate en tus seres queridos. El apoyo de la familia y los amigos es fundamental en estos momentos, y refugiarse en personas de confianza puede ser la clave de la recuperación. Las relaciones sociales positivas mantienen nuestra autoestima a flote. Cuando esa tristeza inicial vaya pasando y la hayas expresado, puede ser el momento de hacer planes. Desahógate si lo necesitas porque expresar las emociones en voz alta puede ser muy útil para poner los hechos en perspectiva.
Contacto cero. Las redes sociales han hecho que las rupturas sean mucho más complicadas, porque es fácil caer en la tentación de entrar en el perfil de nuestro ex, para saber qué está haciendo con su vida. Esto impide que la herida sane adecuadamente, e incluso podemos caer en la obsesión. La solución pasa por eliminar o bloquear a la otra persona, al menos durante un tiempo. El objetivo con esto no es dañar a la otra persona, sino cuidarnos a nosotros mismos.
Nada de victimismos. El odio y el rencor son emociones muy destructivas, que nos impiden pasar a la siguiente etapa del duelo y que pueden ser desgastantes incluso a nivel físico. Aunque puede ser difícil perdonar cuando te han hecho mucho daño, se puede intentar racionalizar poco a poco esta emoción para, por fin, liberarnos de las consecuencias de una ruptura.
No idolatres a tu ex. En lado opuesto puede ocurrir que se genere una idealización hacia la ex pareja, sobre todo cuando la persona se siente abandonada. Superar una ruptura estando enamorada puede ser más complicado, porque resulta más difícil tener cierta objetividad para entender y aceptar que esa persona ya no está en nuestra vida.
Encontrar nuevos retos. El fin de una relación es el comienzo de una nueva etapa, y si el duelo va por el buen camino, acabaremos buscando nuevos retos. Marcarse nuevos objetivos o realizar actividades lúdicas o culturales, puede ayudar a acelerar el proceso del duelo, mejorar la autoestima, y por supuesto, enriquecernos a nivel personal. No quiero ser pesada, pero llegaremos a este punto una vez expresadas nuestras emociones de tristeza, enfado, resentimiento… Recordemos, que es importante pasar por todos los escalones.
¿Cómo superar la ruptura de una relación de muchos años?
Una ruptura de pareja es una experiencia dura, independientemente de las circunstancias, pero, ¿Cómo superar una ruptura con hijos o tras una relación de mucho tiempo? Si se ha pasado una parte importante de la vida con otra persona e incluso se ha formado una familia con ella, el proceso puede ser más difícil. Requiere tiempo, paciencia y voluntad para recorrer un nuevo camino propio.
Según los expertos, el divorcio o separación de pareja es la segunda causa de mayor estrés, después del fallecimiento de un ser querido. Aunque parezca un cliché, es verdad que el tiempo lo cura todo, pero está en nuestra mano hacer todo lo posible para que ese tiempo no se prolongue en exceso.
Si la tristeza, la ansiedad u otros sentimientos negativos se prolongan demasiado y nos impiden llevar una vida normal, podríamos estar hablando de un duelo patológico. Este duelo no resuelto, o mal elaborado, se puede describir como un sentimiento muy intenso que perdura en el tiempo tras la ruptura, y puede derivar en depresión o conductas desadaptativas para intentar llenar el vacío de la pérdida o aliviar el dolor. En estos casos, lo recomendable es ponerse en manos de un profesional de la psicología que a través de la terapia más conveniente, pueda guiarnos de la mejor manera a través de nuestro proceso interior para superarlo. Son muchas las personas que necesitan ayuda para superar rupturas sentimentales y no hay nada malo en ello, para eso estamos los psicólogos.
¿Cómo superar la dependencia emocional después de una ruptura?
La dependencia emocional es un tipo de apego patológico en el que una persona deriva en otra la responsabilidad de diferentes aspectos de su vida. Esto provoca dificultades para tomar decisiones, falta de asertividad para expresar desacuerdo o poner límites, intolerancia a la soledad, escasa autonomía y miedo al abandono. Las personas con este tipo de apego sufrirán doblemente tras una ruptura, ya que además de afrontar el duelo, tendrán que trabajar en su propia dependencia emocional.
Es muy frecuente, que estas personas caigan en lo que se conoce como relaciones liana, que consiste en encadenar una relación con otra sin dejar tiempo para procesar la ruptura. La dependencia emocional también puede provocar una fuerte negación por parte de la persona ‘dejada’ que se niega a aceptar esta nueva soledad. Cuando esta conducta deriva en insistencia, súplicas a la pareja e incluso acoso, estamos hablando de un duelo patológico.
Si hemos percibido que tenemos una clara tendencia a las relaciones dependientes o co-dependientes, es importante encarar el problema y realizar un trabajo para indagar en las causas y tratar de ponerle solución. Solo así podemos tener relaciones sanas y en consecuencia rupturas amorosas también sanas.
Ojalá existiese una clave sencilla para saber cómo superar una ruptura amorosa, pero es un trance difícil sobre el que se han escrito miles de canciones y poemas, y por el que todos en algún momento vamos a tener que pasar. Sin embargo, aunque en un primer momento parezca imposible, tarde o temprano todos volvemos a sanar y a mirar al futuro con esperanza. En el caso de que no sea así, siempre podemos empezar a acudir a terapia y recibir la ayuda que necesitamos.
Si quieres saber la relación con tu ex pareja era sana o no, te comparto un post en el que hablo sobre 7 características de una relación de pareja sana. También te dejo este otro post en el que hablo sobre personas con apego evitativo.
https://iratxelopezpsicologia.com/como-s...-relacion/