20 Feb, 2018, 09:34 PM
Otra "mentira piadosa", no viene de parte de la sucursal, si no de los hermanos que con buena fe, querían cooperar con el progreso de la obra en los municipios de Antioquia. Resulta que, muchas familias se mudaron a territorios de necesidad de publicadores. En varios municipios no se cuenta con salón del reino propio, así que los hermanos se reúnen en viviendas o locales alquilados.
La sucursal como requisito para aprobar la construcción de un salón del reino en un municipio, solicitaba que como mínimo hubiera 30 publicadores activos en la congregación y que hubiera un anciano nombrado nativo del territorio. Acontece, que se mudaban varias familias (o una familia numerosa) a una congregación y lógicamente esta pasaba de tener 20 publicadores a cumplir la con la meta de los 30. Depues de unos 6 meses, en la visita del circuito se mandaba la solicitud para que aprobarán la construcción del salón del reino y la sucursal daba el visto bueno y se emprendía un nuevo proyecto.
Con el tiempo, estas familias (o familia) se mudaban a otra congregación pequeña para ayudar a completar la cifra de los 30 publicadores y así sucesivamente la sucursal fue aprobando varios proyectos de construcción. Este fenómeno se repitió en varios territorios del país.
Pero que sucedía, con la congregación que tenia su nuevo salón del reino?. Debido a que las familias cooperantes se marchaban a otras congregaciones, las contribuciones mermarón. Y ahora, quien pagaria los servicios, suministros de aseo, los impuestos y el mantenimiento del salón... El mantener el salón del reino se volvia mas costoso, que alquilar un local o una casa.
A esto, se le puede añadir expulsiones por pecados crasos, baja de privilegios de ancianos. Y una congregación sin ancianos, quien administraría el salón?. Hubieron casos puntuales en Antioquia donde se tuvieron que cerrar los salones del reino.
Entonces, ese supuesto progreso en la obra era una simple fachada, por este motivo y por muchos mas la organización decidió fusionar congregaciones.
La sucursal como requisito para aprobar la construcción de un salón del reino en un municipio, solicitaba que como mínimo hubiera 30 publicadores activos en la congregación y que hubiera un anciano nombrado nativo del territorio. Acontece, que se mudaban varias familias (o una familia numerosa) a una congregación y lógicamente esta pasaba de tener 20 publicadores a cumplir la con la meta de los 30. Depues de unos 6 meses, en la visita del circuito se mandaba la solicitud para que aprobarán la construcción del salón del reino y la sucursal daba el visto bueno y se emprendía un nuevo proyecto.
Con el tiempo, estas familias (o familia) se mudaban a otra congregación pequeña para ayudar a completar la cifra de los 30 publicadores y así sucesivamente la sucursal fue aprobando varios proyectos de construcción. Este fenómeno se repitió en varios territorios del país.
Pero que sucedía, con la congregación que tenia su nuevo salón del reino?. Debido a que las familias cooperantes se marchaban a otras congregaciones, las contribuciones mermarón. Y ahora, quien pagaria los servicios, suministros de aseo, los impuestos y el mantenimiento del salón... El mantener el salón del reino se volvia mas costoso, que alquilar un local o una casa.
A esto, se le puede añadir expulsiones por pecados crasos, baja de privilegios de ancianos. Y una congregación sin ancianos, quien administraría el salón?. Hubieron casos puntuales en Antioquia donde se tuvieron que cerrar los salones del reino.
Entonces, ese supuesto progreso en la obra era una simple fachada, por este motivo y por muchos mas la organización decidió fusionar congregaciones.