23 Nov, 2018, 06:16 AM
Las muchas ocasiones en las que subía a la plataforma para hacer asignaciones, discursos y especialmente lecturas de la Atalaya, algo en lo que solía fijarme era la cara de los hermanos del auditorio. Si bien siempre encuentras el que tiene los ojos abiertos mirando al orador y cabeceando con un síiii, siiii, siiiii.... la inmensa mayoría mostraba signos de tedio, cara anodina, ojos distraidos y gestos serios. Fue algo que siempre me llamó la atención. Alivio sentían cuando venía a discursar ese hermano de otra congregación que solía usar chascarrillos y frases llenas de humor.
Ay ¡que humanos que somos en las congregaciones!
Ay ¡que humanos que somos en las congregaciones!