12 Mar, 2019, 05:23 PM
(12 Mar, 2019, 04:01 PM)Demas escribió: Joshuan-JTG has traído a mi mente el caso de un anciano a quien nombrare como Juanito, es un excelente orador, diría uno de los que se cuentan con los dedos de las manos, contador publico y catedratico. Además de contar con el amor y respeto de su congregación.
Juanito ya tenia su asignación en una asamblea regional, pero de pronto se la quitaron, el pecado, ser gordito, como dice la "instrucción"; no lo podíamos creer. El se sintió avergonzado y humillado.
Era uno de los pocos oradores que cautivaba al auditorio, que acaparaba su atencion. Pero ya no mas Juanito hasta que adelgaze.
Cabe decir, que renunció a su "privilegio", a la semana siguiente. Pero al momento no le aceptaron su renuncia, pasaron varios meses que trataron de convencerlo para que diera marcha atras a su decisión. No lo lograron.
Sigue en su congregación, y los miembros de la misma le siguen viendo como su anciano, acuden siempre a el por ayuda. Lógicamente despertó celos en sus antiguos coancianos, quienes, digamos, le " sugirieron" no atender asuntos de congregación, que compete solo a los nombrados.
Cayo en depresión, que va superando poco a poco.
Ah, y antes que se me olvide, el comité de asamblea vio a bien que su camioncito (aunque superaba en tamaño al resto de los vehículos de los TJ), siguiera conservando su privilegio de transporte, hay que ir a traer y a dejar las silas para el local de asamblea y otros menesteres.
Y sus conocimientos de contador siguen siendo útiles, y claro su cash.
A veces me pregunto, por que nos dejamos pisotear tanto? Cuando perdimos nuestra dignidad?
Todo hombre aspira al poder: cada uno desearía ser un dictador; casi todos sacrificarían el bienestar del prójimo por alcanzar sus metas personales
Los protocolos de los sabios de Sión