01 Apr, 2019, 06:12 AM
Recuerdo cuando era un TJ adicto e involucrado que, a pesar de estar muy persuadido a creer y a estar dispuesto a defender lo indefendible, en ocasiones mi mente salía del bucle wachtoweriano por unos minutos y me decía a mí mismo que había algo que no me cuadraba pero casi al instante me daba vértigo y volvía al dichoso bucle.
Aún cuando vivía mentalmente dentro, la espontaneidad de algunas cosas sacaban a la luz que todo no era tan bonito como parecía. Un ejemplo que me pasó con una compañera de trabajo testigo-precursora esta semana: me comenta que le cambian el horario de la reunión del domingo por la tarde al domingo por la mañana a las 11h. Le pregunté sobre el motivo y su opinión al respecto. Su respuesta me dejó pensativo: "Sí, prefiero la mañana. Así uno SE LIBERA DE ESE PESO ¿sabes? No puedes hacer nada el domingo pensando en que a la tarde tienes que ir a la reunión"
Alguno puede responder que es una forma de hablar, una simple expresión. Pero creo que en lo más hondo de los testigos hay un "qué fastidio otra vez a cambiarse y a la reunión". A veces salen a flote de forma espontanea nuestros sentimientos más profundos queriendo o sin querer. Recordé en ese momento que aún estando muy cegado con la JW pensaba que tantas reuniones, predicación los fines de semana por la mañana, la preparación, sobre todo el SUBRAYADO de las atalayas y demás historias hacían de la vida de un testigo un sinvivir. Que Cristo no pedía tantas formalidades en su enseñanza. Y bien que guardaba para mí esos pensamientos.
¿Cual fue vuestra experiencia al respecto mientras estabais programados?
Aún cuando vivía mentalmente dentro, la espontaneidad de algunas cosas sacaban a la luz que todo no era tan bonito como parecía. Un ejemplo que me pasó con una compañera de trabajo testigo-precursora esta semana: me comenta que le cambian el horario de la reunión del domingo por la tarde al domingo por la mañana a las 11h. Le pregunté sobre el motivo y su opinión al respecto. Su respuesta me dejó pensativo: "Sí, prefiero la mañana. Así uno SE LIBERA DE ESE PESO ¿sabes? No puedes hacer nada el domingo pensando en que a la tarde tienes que ir a la reunión"
Alguno puede responder que es una forma de hablar, una simple expresión. Pero creo que en lo más hondo de los testigos hay un "qué fastidio otra vez a cambiarse y a la reunión". A veces salen a flote de forma espontanea nuestros sentimientos más profundos queriendo o sin querer. Recordé en ese momento que aún estando muy cegado con la JW pensaba que tantas reuniones, predicación los fines de semana por la mañana, la preparación, sobre todo el SUBRAYADO de las atalayas y demás historias hacían de la vida de un testigo un sinvivir. Que Cristo no pedía tantas formalidades en su enseñanza. Y bien que guardaba para mí esos pensamientos.
¿Cual fue vuestra experiencia al respecto mientras estabais programados?