01 Apr, 2019, 10:12 AM
Creo que ya lo he comentado alguna vez, yo fui un creyente a pies juntillas pero a mi manera. Es decir, subrayaba deprisa sin pararme a leer los textos, rara vez leía el texto diario, igual pasaba con la Biblia. Eso sí, mis asignaciones me las preparaba a conciencia, y cuando podía hacía el precursorado. Salía al ministerio casi todos los fines de semana. Cumplía con los privilegios que se me otorgaban.
Me pasaba como a ti, de vez en cuando las dudas me envolvían tanto que sentía temor por terminar siendo apóstata, entonces retornaba enseguida y asustado a mi programación Wacht.
A pesar de todo eso, para mi terminó siendo un lastre tener que ir a las reuniones, tenía ganas de ir solo por ver a mis amigos y conocidos. El día que no iba a alguna reunión por el motivo que fuese, notaba que ese día lo pasaba bastante mejor que cuando iba. Conforme iba desprogramándome y quitándome privilegios y responsabilidades de encima, mejor me sentía. La cúspide fue cuando ya no pude más y dejé de salir a predicar. Llevo algo más de un año siendo inactivo y no hay nada más liberador y relajante. El saber que ya no voy a ir más a molestar a nadie, que ya no voy a pasar más vergüenza cuando me vean con la carpeta de marras, trajeado y paseando calles. Mi siguiente paso será el dejar de asistir definitivamente a las reuniones, pero me temo que ese es un paso que tomaré a largo plazo, muy a mi pesar.
Estoy convencido de que en mayor o en menor medida, a todos los TJ se les ha pasado por su mente alguna duda seria, pero que por temor a que eso debilite su fe, enseguida vuelven a su adoctrinamiento.
Me pasaba como a ti, de vez en cuando las dudas me envolvían tanto que sentía temor por terminar siendo apóstata, entonces retornaba enseguida y asustado a mi programación Wacht.
A pesar de todo eso, para mi terminó siendo un lastre tener que ir a las reuniones, tenía ganas de ir solo por ver a mis amigos y conocidos. El día que no iba a alguna reunión por el motivo que fuese, notaba que ese día lo pasaba bastante mejor que cuando iba. Conforme iba desprogramándome y quitándome privilegios y responsabilidades de encima, mejor me sentía. La cúspide fue cuando ya no pude más y dejé de salir a predicar. Llevo algo más de un año siendo inactivo y no hay nada más liberador y relajante. El saber que ya no voy a ir más a molestar a nadie, que ya no voy a pasar más vergüenza cuando me vean con la carpeta de marras, trajeado y paseando calles. Mi siguiente paso será el dejar de asistir definitivamente a las reuniones, pero me temo que ese es un paso que tomaré a largo plazo, muy a mi pesar.
Estoy convencido de que en mayor o en menor medida, a todos los TJ se les ha pasado por su mente alguna duda seria, pero que por temor a que eso debilite su fe, enseguida vuelven a su adoctrinamiento.
Hilan mentiras acordes con el tamaño de su fe
No predicáis un mensaje de amor, hacéis apología de un genocidio mundial
No predicáis un mensaje de amor, hacéis apología de un genocidio mundial