02 Jul, 2019, 05:03 PM
PARTE 7: Nombramiento de Siervo Ministerial
El 17 de abril de 2013 llegué al salón del reino, me tocó servir de acomodador ese día y por eso llegué temprano, mi maestro de la Biblia me estaba esperando, me dijo que dejara mis cosas y le acompañara fuera del salón. Lo primero que hizo fue abrazarme al ponerse a un lado mío, caminamos rumbo al portón del salón y me dijo: "Tony, ¿qué crees?". Lo miré imaginando lo que me iba a decir: "llegó tu carta con el nombramiento de siervo ministerial", mis ojos brillaron y no me lo podía creer, mi MÁS GRANDE deseo hecho realidad, me pidió no decir nada a nadie y que en un momento más me llamarían a la sala b para formalizar el asunto.
La reunión empezó con el cántico y la oración, 10 minutos después me llamó el coordinador y mi maestro a la sala b, cerraron la puerta y me pidieron sentarme en la primera banca. El coordinador me hizo 2 preguntas: "¿hay algo incluso antes de tu bautismo que te impida recibir el nombramiento de siervo ministerial?", me quedé petrificado y en 1 segundo recordé mejor me quedo callado, después vino la segunda pregunta: "¿hay algo por lo que no se deba anunciar tu privilegio a la congregación?", giré la cabeza y dije NO. Vi la mirada del coordinador y como que percibió que le estaba echando mentiras.
Me pidieron salir de la sala b y no decir nada hasta que se diera el anuncio a la congregación. La reunión llegó al final y el coordinador subió a la plataforma a dar 1 anuncio: "los hermanos ??????? y Antonio Calderón han sido nombrados siervos ministeriales". El aplauso fue increíble como la fuerza de muchas aguas, después de la oración abrazos y felicitaciones, un hermano mayor que yo por unos cuantos años y que me dio estudio bíblico cuando yo tenía 17 años y estudiaba en la preparatoria me dijo: "Tony, ahora si te voy a respetar y te voy a decir Antonio". Siempre cuando levantaba la mano para comentar me decían Tony, aquel día me convertí en el "hermano Calderón".
me sentí tan FELIZ, lástima que mi abuelo murió 1 año antes y no me pudo abrazar y felicitar aquella noche. Cuando llegué a mi casa mi mamá que nunca ha sido testigo de Jehová no lo podía creer. Admito que el privilegio, nombramiento o el puesto como lo quieran ver ayudó y ayudó muchísimo ha alcanzar otros objetivos personales dentro de la congregación y el circuito. Me sentí tocado por Dios.
Pero nadie es perfecto y tus pecados te alcanzan tarde o temprano. Admito mis errores y hay quienes me comparan con los Papas católicos, ellos lo fueron todo en esta vida menos unos hombres santos.
En la siguiente parte narraré lo que pasó el domingo de esa semana y que causó un gran escándalo en el departamento de contabilidad al punto que el departamento tuvo que ser reformado y sigue las mismas pautas hasta el día de hoy.
"El peor enemigo de la Sagrada Escritura es la imaginación humana", El Zelote