05 Sep, 2017, 02:30 PM
Las casas en Maracaibo casi todas conectan el patio con un portón o con una reja abierta desde donde alcanza verse el patio.
Ese día toqué la puerta, nadie abrió. Me toco acercarme al timbre que estaba en un extremo de la pared desde donde alcanzaba ver hacia el patio. De repente veo a alguien semidesnudo, volándose la paredilla que separaba una casa de la otra.
Después de timbrar, salió una mujer mayor en años arreglándose la bata con una rabia diciendo que habíamos interrumpido un momento muy importante en su vida. De repente llego alguien que se identifico como el esposo y entro insultándola y de paso a nosotros.
El hombre dijo: Donde esta quien calienta mi cama cuando no estoy?
Y yo me dije: Kato, vámonos de aquí que donde hay cachos no viene nada bueno.
El Kato
Ese día toqué la puerta, nadie abrió. Me toco acercarme al timbre que estaba en un extremo de la pared desde donde alcanzaba ver hacia el patio. De repente veo a alguien semidesnudo, volándose la paredilla que separaba una casa de la otra.
Después de timbrar, salió una mujer mayor en años arreglándose la bata con una rabia diciendo que habíamos interrumpido un momento muy importante en su vida. De repente llego alguien que se identifico como el esposo y entro insultándola y de paso a nosotros.
El hombre dijo: Donde esta quien calienta mi cama cuando no estoy?
Y yo me dije: Kato, vámonos de aquí que donde hay cachos no viene nada bueno.
El Kato