24 Aug, 2020, 06:00 AM
Tu punto de vista me parece muy interesante.
Lo que no me convence es esa importancia que le das al texto bíblico (en este caso estamos hablando del Antiguo Testamento).
Me explico: la Biblia es una recopilación interesada, a lo largo de siglos. Las "fuentes" de esa recopilación son muy dispares, y estuvieron siendo escogidas (y retocadas y modificadas) a lo largo de épocas, hasta que finalmente en el S.VI a.C., la corriente teológica que más fuerza consiguió reunir (la deuteronomista) impuso su tesis monoteísta por la fuerza mediante el rey Josías "encontrando providencialmente los rollos de la ley" (por cierto, su "premio" fue incluirle por nombre en una profecía escrita a posteriori...)
Analizando con cuidado, se puede apreciar lo que los historiadores han concluido: que la sociedad hebrea primitiva era henoteísta, o sea, adoraba a varios dioses, cada uno con su poder y características, sin problemas de celos entre ellos. Por ejemplo, Ásera era la mismísima esposa de Yhwh...
La tendencia de los deuteronomistas, con el único objetivo de dar cohesión política a la nación y ostentar el máximo poder, obligó al monoteísmo por el (bajo la nueva óptica ahora sí) celoso Yhwh, justo a la vuelta del exilio en Babilonia, dando así justificación teocrática a las penas de los israelitas con el siguiente truco: todo lo que había ido mal en la historia del pais se explicaba por la traición de los israelitas para con la adoración del 'único' Dios. Ahí se incluye la fábula del éxodo y los 40 años vagando, las victorias de los pueblos vecinos, el exilio/disgregación de Israel por Asiria y hasta el exilio de Judá por Babilonia, etc...
En el pentateuco se observa que no fue escrito por Moisés (se habla de él en tercera persona; y se escribe su muerte y enterramiento). Además se incluyen versiones adaptadas de distintas leyendas sumerias (el paraíso original, la existencia de gigantes, los reyes legendarios que vivieron cientos de años, el diluvio, etc) absorbidas durante las décadas de exilio.
El/los elohim se personifican de un modo completamente contradictorio en los distintos relatos, con reacciones bipolares y esquizofrénicas, con una personalidad favoritista, ruin, egocéntrica e infantil (del "todopoderoso creador del universo" se esperaría un poquito más...).
En consecuencia, el "texto bíblico" no es uno, ni único, ni confiable por todo lo expuesto brevemente.
Lo que dice un versículo no tiene una "auto-interpretación", ni hay coherencia entre los distintos libros, ni consistencia; sino muchas e insalvables contradicciones.
Según yo lo veo, no hay nada que sacar del texto bíblico, sino tal vez alguna información contextual para entender la mentalidad de gentes de hace 2.500 años, y la lección (muy bien aprendida por el cristianismo posteriormente) de cómo usar la religión para manipular y ejercer poder sobre los pueblos.
Lo que no me convence es esa importancia que le das al texto bíblico (en este caso estamos hablando del Antiguo Testamento).
Me explico: la Biblia es una recopilación interesada, a lo largo de siglos. Las "fuentes" de esa recopilación son muy dispares, y estuvieron siendo escogidas (y retocadas y modificadas) a lo largo de épocas, hasta que finalmente en el S.VI a.C., la corriente teológica que más fuerza consiguió reunir (la deuteronomista) impuso su tesis monoteísta por la fuerza mediante el rey Josías "encontrando providencialmente los rollos de la ley" (por cierto, su "premio" fue incluirle por nombre en una profecía escrita a posteriori...)
Analizando con cuidado, se puede apreciar lo que los historiadores han concluido: que la sociedad hebrea primitiva era henoteísta, o sea, adoraba a varios dioses, cada uno con su poder y características, sin problemas de celos entre ellos. Por ejemplo, Ásera era la mismísima esposa de Yhwh...
La tendencia de los deuteronomistas, con el único objetivo de dar cohesión política a la nación y ostentar el máximo poder, obligó al monoteísmo por el (bajo la nueva óptica ahora sí) celoso Yhwh, justo a la vuelta del exilio en Babilonia, dando así justificación teocrática a las penas de los israelitas con el siguiente truco: todo lo que había ido mal en la historia del pais se explicaba por la traición de los israelitas para con la adoración del 'único' Dios. Ahí se incluye la fábula del éxodo y los 40 años vagando, las victorias de los pueblos vecinos, el exilio/disgregación de Israel por Asiria y hasta el exilio de Judá por Babilonia, etc...
En el pentateuco se observa que no fue escrito por Moisés (se habla de él en tercera persona; y se escribe su muerte y enterramiento). Además se incluyen versiones adaptadas de distintas leyendas sumerias (el paraíso original, la existencia de gigantes, los reyes legendarios que vivieron cientos de años, el diluvio, etc) absorbidas durante las décadas de exilio.
El/los elohim se personifican de un modo completamente contradictorio en los distintos relatos, con reacciones bipolares y esquizofrénicas, con una personalidad favoritista, ruin, egocéntrica e infantil (del "todopoderoso creador del universo" se esperaría un poquito más...).
En consecuencia, el "texto bíblico" no es uno, ni único, ni confiable por todo lo expuesto brevemente.
Lo que dice un versículo no tiene una "auto-interpretación", ni hay coherencia entre los distintos libros, ni consistencia; sino muchas e insalvables contradicciones.
Según yo lo veo, no hay nada que sacar del texto bíblico, sino tal vez alguna información contextual para entender la mentalidad de gentes de hace 2.500 años, y la lección (muy bien aprendida por el cristianismo posteriormente) de cómo usar la religión para manipular y ejercer poder sobre los pueblos.
"La VERDAD se descubre; la MENTIRA se construye"