28 Apr, 2021, 11:36 AM
Cuando recién empezaba a estudiar, una de las jóvenes de la congregación quedo embarazada y fue expulsada. El papá, uno de los ancianos, le pidió que se vaya de la casa por ser “una mala influencia” para sus hermanos y la congregación. La hermana no hizo y enfrento estar embarazada y estar sola sin un trabajo fijo y sin la ayuda de la familia. Muchas veces le preguntaba al hermano que me daba estudio porque nadie la ayudaba cuando llegaba sola y empapada por la lluvia al salón. La respuesta siempre era la misma: “ella actuó mal para con Jehová y es una muestra de amor lo que esta viviendo.”. recuerdo verla caminando y llorando con su bebe en brazos en medio de calles llenas de agua. Nadie se detenía a ayudarla, al mínimo esfuerzo por querer ayudarla los ancianos reprendían a cualquiera. Dios a luz sola, y le tocaba llevar a la débil criatura al trabajo, al cabo de dos meses se enfermó. Hoy me arrepiento de no haber dado algún paso para ayudarla.
Al poco tiempo, mi familia junto con otras familias del barrio, se enteraron que por el poco dinero que ella ganaba, el bebe desarrollo anemia y su crecimiento no era normal, así que decidimos ayudarla. Él bebe se recuperó, pero nunca apareció su familia ni la congregación. Cuando finalmente regreso a la congregación, seguía en pie el arreglo de no aplaudir después de dar el anuncio de regreso, el anciano a cargo de dicho anuncio dijo de manera muy despectiva: “Vamos anunciar una reintegración a la congregación, pero no debemos aplaudir, porque lo que hizo esta persona no lo merece.” Y de esa manera tan fría fue bien recibida esta querida hermana. Nunca entendí como era posible abrazarla después de haberla ignorado por varios años, como si sus problemas nunca hubiesen existido, como si gran parte de los problemas no lo hubiese causado el haberla ignorarla. Ahora entiendo que parte de la magia de esta secta es causar este dolor y justificarse con “amor”.
Al poco tiempo, mi familia junto con otras familias del barrio, se enteraron que por el poco dinero que ella ganaba, el bebe desarrollo anemia y su crecimiento no era normal, así que decidimos ayudarla. Él bebe se recuperó, pero nunca apareció su familia ni la congregación. Cuando finalmente regreso a la congregación, seguía en pie el arreglo de no aplaudir después de dar el anuncio de regreso, el anciano a cargo de dicho anuncio dijo de manera muy despectiva: “Vamos anunciar una reintegración a la congregación, pero no debemos aplaudir, porque lo que hizo esta persona no lo merece.” Y de esa manera tan fría fue bien recibida esta querida hermana. Nunca entendí como era posible abrazarla después de haberla ignorado por varios años, como si sus problemas nunca hubiesen existido, como si gran parte de los problemas no lo hubiese causado el haberla ignorarla. Ahora entiendo que parte de la magia de esta secta es causar este dolor y justificarse con “amor”.