26 Oct, 2021, 10:46 PM
Hoy estoy en modo Zen y me da fiaca recordar esos años de tortura sistemática, en las que se la tenían jurada a mi esposa al parecer. Porque todos los meses me llamaban por algo que había hecho o dejado de hacer. Siempre pidiéndome que hablara seriamente con ella, cosa que rara vez hacía, porque no me parecían cosas malas.
Las visitas del superintendente eran una tortura china para mí, los ancianos me encontraban errores hasta donde no los había. Pero a los amigotes de los ancianos, ese que todo el mundo sabía que golpeaba a su esposa o aquel otro que fue visto con una jovencita 30 años menor que el besandose en una zona despoblada, esos mismos fueron nombrados ministerial y anciano respectivamente.
En los últimos años mi mejor excusa fue: "no me siento bien en sentido emocional" para librarme de su larga lista de requerimientos y solo eso me funcionó. Hoy por hoy, cada seis meses me toca lectura de la Biblia en la escuela, lamentablemente tengo que hacerla para no levantar sospechas.
Las visitas del superintendente eran una tortura china para mí, los ancianos me encontraban errores hasta donde no los había. Pero a los amigotes de los ancianos, ese que todo el mundo sabía que golpeaba a su esposa o aquel otro que fue visto con una jovencita 30 años menor que el besandose en una zona despoblada, esos mismos fueron nombrados ministerial y anciano respectivamente.
En los últimos años mi mejor excusa fue: "no me siento bien en sentido emocional" para librarme de su larga lista de requerimientos y solo eso me funcionó. Hoy por hoy, cada seis meses me toca lectura de la Biblia en la escuela, lamentablemente tengo que hacerla para no levantar sospechas.