[Mr. Smiley]

Hola comunidad de amig@s y compañer@s,

Permítanme contarles la historia de la desprogramación de dos de mis tres hijos.

Antecedentes
Somos una familia colombo-libanesa, mi esposa es colombiana propia por eso mis hijos tenían desde su temprana edad amigos hijos de damas latinas (colombianas, venezolanas, brasileñas, paraguayas, argentinas) casadas con libaneses y viven aquí en el Líbano, con lo que implica eso de amistad con niños no testigos.

Inicio
Creo que el inicio, según me cuentan ellos fue mí salida de la secta en 2010, salí con panderetas y tambores, acusado de apostasía, después de tantas discusiones con los ancianos por no contestar mis inquietudes, y a base de una pregunta: ¿crees que el esclavo fiel y discreto es el único conducto de comunicación entre dios y la humanidad? mi respuesta fue clara: NO.

Mis hijos mayores (gemelos) en aquel tiempo tenían apenas 12 años, y claro me dejaron ajeno a todo lo que se hace respecto a su relación con la secta, quedamos como familia que nadie se mete en la creencia del otro, hasta que yo llevaba mi esposa y tres hijos a las asambleas, hasta que empezaron los mayores a manejar automóvil.

Como no podía hablar con ellos (mis tres hijos y esposa) directa o indirectamente, todo lo que podía hacer era enseñarles a tener un pensamiento crítico, mejoré mi relación con ellos (no fue ni rápido ni fácil sabiendo como la secta bombardea quien deja sus filas y lo califica como lo peor), con el tiempo, y como padre tenía que responder a muchas preguntas de mis hijos, pues les enseñé a pensar por ellos mismos, a plantear una serie de preguntas para cada asunto, tal como: porqué? cómo?, cuando? cuanto? donde? etc….

2014
Y me preguntan ¿porqué amo a Colombia? La mayoría de las cosas buenas de mi vida viene de Colombia. En 2014 fuimos toda la familia a Colombia, país de mi esposa, allá mis hijos tenian dos opciones de asociación: Con jóvenes de la familia materna de mi esposa, todos testigos de Jehová, o con jóvenes de la familia paterna de mi esposa, “mundanos”, y ya saben con quién disfrutaban la compañía y con quien se aburrían, con quien podían formar grupos de jóvenes y salir juntos y solos y con quien tenían que salid con un “adulto” y preferiblemente “anciano”, hasta entre primos no había confianza y miraban a los jóvenes como lo peor. Volvimos de nuestras largas vacaciones (dos meses) y mis hijos con la comparación en su mente, y la conclusión: Ser testigo es vivir aburrido por el resto de sus vidas, cada vez que visitan Colombia tengo que interferir para que acepten invitación a alguna actividad de sus tíos maternos.

Toca Fondo
En la familia había una decisión definitiva: nuestros hijos tienen que estudiar en la universidad y ser profesionales, y mi amada esposa, tan fiel y discreta, estaba de acuerdo con esta decisión. Cuando comenzaron a estudiar la universidad (mis dos hijos mayores), los ancianos de la congregación se reunieron con ellos y con otros dos jóvenes universitarios, quitándoles los “privilegios” si no dejan sus estudios, aquella noche volvieron a la casa ofendidos, pero tomemos la decisión como familia de apoyarles hasta que terminen. La ofensa más grande ellos sintieron durante la visita del super de circuito, se reunió con ellos y los otros dos jóvenes universitarios, supuestamente a aconsejarles, y la conclusión del súper fue: porqué estudien en la universidad si al final van a trabajar taxistas (lavaventanas según Cyberjesus), claro la ofensa no fue por el oficio, somos personas que vivimos de nuestro trabajo y respetamos cualquier trabajo honrado, pero la ofensa fue a su intelecto.

Así que dejaron poco a poco las reuniones, y de repente EMPEZARON A HACERME PREGUNTAS, les contestaba utilizando materiales en las paginas disidentes, y les dirigí a leer algunas (participan en JW FACTS). Aun asistían a la conmemoración, hasta que empezó la pandemia, allí fue que dijeron a su madre que ya no quieren nada con la secta, que ellos saben toda la realidad acerca de esta empresa disfrazada de religión.

Poco a poco empezaron a comunicarse con otros dos disidentes que pertenecían a nuestra congregación (expulsados por supuesto) y pusieron eso en manifiesto por facebook, algo que causó llamadas de los ancianos, la respuesta de mis dos hijos fue: Toda la pandemia ni se interesaron en cómo vivimos, ¿ahora qué quieren? y no quisieron reunirse con los ancianos.

Finalmente, mis hijos me dijeron que quieren pasar su carta de desasociación, y lo hicieron contra mi voluntad porque no quería que den este crédito a los ancianos de la secta, total, ya están fuera de la secta, siguiendo sus estudios posgrado, trabajando en empresas respetables y ganando más terreno como profesionales y personas.

Puntos Claves
En este proceso de la desprogramación de mis hijos hubo unos puntos clave:
- Mi postura firme y mi buen comportamiento como padre, esposo y persona (más tolerante, menos exigente)
- Aunque no podía contarles las cosas claramente, les enseñé a buscar ELLOS MISMOS sus propias verdades, y no dejar terceros que lo hagan por ellos, por más fieles y discretos que alegan ser
- Estarme disponible para que encuentren donde ir al dejar la secta.
- Tolerar desde siempre que tengan buenos amigos fuera del club social de la secta.

Dejo este resumen tan extenso, llamando a quien no ha decidido proclamar su verdadera postura de nuestros compañeros, hazlo por tus hijos y por todos los tuyos.

Stargate: No me pides que se registren en el foro, se los pedí, ellos nos leen de vez en cuando, pero se sienten más cómodos en JW facts y las paginas en inglés (se creen gringos, solo su padre se cree latino)

Salu2