14 Apr, 2025, 08:50 PM
Según Reza Aslan, en su libro "Dios: Una historia humana", el monoteísmo no solo exige la creencia en un solo dios, sino también la negación de cualquier otro (en contraste con el henoteísmo). En ese sentido, para él, solo ha habido tres intentos de monoteísmo: el de Akenatón, el de Zaratustra y el del pueblo judío, que sería el que conseguiría implementarlo con éxito.
Sobre la creencia en Dios o nuestra naturaleza espiritual, sus apuestas son parecidas a las que menciona Fidencio: una necesidad de creer y dar una respuesta a cosas que no podemos explicar. Fenómenos como la pareidolia (ver caras o formas en las cosas o naturaleza) pudieron llevar a los seres humanos a concebir los primeros dioses y al animismo. A esto se sumó las manifestaciones de poder que veían en la naturaleza. Considera que la idea de un alma o algo que sobrevive al cuerpo o posee una existencia independiente también surgió desde los inicios de la humanidad, como parte de su experiencia con la muerte y el deseo de mantener un contacto con los seres queridos.
Reza Aslan, iraní de nacimiento, se crió bajo el islam, posteriormente se hizo cristiano evangélico y después regresó al islam; sin embargo, al momento de escribir su libro se definía simplemente como un panteísta: "Dios y el universo son uno y lo mismo, ergo, nosotros somos Dios". Detrás de ello su pensamiento parece sugerir dos cosas: primero, que nosotros inventamos a Dios como solución a una necesidad y que él ha decidido adoptar esa idea; y segundo, que al final ese "dios" es solo una manera humana de imaginar que todo está interconectado, todo surgió de un mismo origen y que solo nos resta intentar vivir en armonía con la naturaleza y nuestro entorno.
Sobre la creencia en Dios o nuestra naturaleza espiritual, sus apuestas son parecidas a las que menciona Fidencio: una necesidad de creer y dar una respuesta a cosas que no podemos explicar. Fenómenos como la pareidolia (ver caras o formas en las cosas o naturaleza) pudieron llevar a los seres humanos a concebir los primeros dioses y al animismo. A esto se sumó las manifestaciones de poder que veían en la naturaleza. Considera que la idea de un alma o algo que sobrevive al cuerpo o posee una existencia independiente también surgió desde los inicios de la humanidad, como parte de su experiencia con la muerte y el deseo de mantener un contacto con los seres queridos.
Reza Aslan, iraní de nacimiento, se crió bajo el islam, posteriormente se hizo cristiano evangélico y después regresó al islam; sin embargo, al momento de escribir su libro se definía simplemente como un panteísta: "Dios y el universo son uno y lo mismo, ergo, nosotros somos Dios". Detrás de ello su pensamiento parece sugerir dos cosas: primero, que nosotros inventamos a Dios como solución a una necesidad y que él ha decidido adoptar esa idea; y segundo, que al final ese "dios" es solo una manera humana de imaginar que todo está interconectado, todo surgió de un mismo origen y que solo nos resta intentar vivir en armonía con la naturaleza y nuestro entorno.