[jdrr88]

Muchas gracias por brindar este espacio.
Espero poder contribuir en algo hacia los demás. 

Mi problema comienza con un anciano, Coordinador del cuerpo de ancianos, al que se le ha hecho habitual el flirteo con las mujeres, aún enfrente de su esposa.

Hace no mucho llegó una carta a la congregación donde se denuncia el adulterio por parte de él y una publicadora de la congregación. Lo extraño está en las reacciones que tuvo él. Las de ella no son extrañas, ya que es común el enojo entre quienes son culpables de pecados así.
En el caso de él, a pesar de que se creía en su palabra y a que no hay testigos de dicho acto, después se molesta y empieza a elaborar una bola de humo para apaciguar a la esposa. Involucra a otros hermanos acusándolos de algo que no han hecho y de lo que no tiene pruebas.
También insistió en que no se hablara con la publicadora, pues no quería que pasara por una situación así. Se le negó esto que pidió y se molestó.
Aunque fueron 2 ancianos quienes investigaron, no informaron nada concreto al resto del cuerpo y así dejar el asunto, en aquí nada pasó.
Todo esto se refleja en los que son de corazón sincero y hace que se cuestionen si en realidad estos pastores sirven a Jehová.

Espero me den algún consejo al respecto.
Saludos a todos.