01 Jun, 2019, 07:52 AM
Justificación. Durante nuestro proceso de desprogramación a veces nos preguntamos cuántos o quienes de nuestro entorno físico cercano pueden estar pasando por el mismo proceso. Puede ser que incluso un conocido nuestro sea un compañero disidente, pero no hay manera de saberlo pues el anonimato que ofrece Internet como las consecuencias al interior del culto de revelar nuestras identidades impide que lo andemos comunicando a los cuatro vientos.
No les ha pasado —a quienes aún asisten— que miran la multitud en una asamblea y se preguntan cuántos entre esos miles es como yo? Alguien más visita el foro? Cuál será su nick?
El año pasado el compañero Netineotraslapado abrió en este sentido (creo) el hilo Chateando en la Asamblea Regional
Qué es el Geocaching. Es básicamente un juego, muy antiguo por cierto, pero evoucionado a nuestros tiempos. Yo lo comparo a una búsqueda de tesoros.
Un participante esconde algún tipo de "premio o tesoro", publica su ubicación, luego quien haya visto la publicación y esté en el lugar indicado lo recoge y pone otro.
Geocaching - Wikipedia, la enciclopedia libre
https://es.wikipedia.org/wiki/Geocaching
Estrictamente el geocaching hace uso de tecnologías GPS y tiene ciertas normas específicas. La idea es adaptarlo a la realidad disidente.
Generalmente se esconde un contenedor que lleva adentro una hoja, a modo de bitácora, en donde cada visitante escribe su nombre para registrar su visita. Además se deja algún tipo de recuerdo que los demás puedan llevarse, suelen ser chucherías: botones, juguetes, monedas...
En el caso disidente podría ser un simple papelito doblado y escondido en un lugar en donde no lo saquen al primer aseo que se haga luego de terminado el programa.
Algunos jugadores del geocaching tradicional han enfrentado algunas dificultades de las que es bueno ser conscientes. Por ejemplo, han sido abordados por la policía pues se ven muy sospechosos rondando algún lugar como buscando algo o tratando de esconder algo. Otros han incurrido en vandalismo, al intentar fijar los contenedores con tornillos, silicona, perforar algún muro, colocar en lo alto de un poste eléctrico, etcétera. La norma de oro es CERO VANDALISMO.
La forma de esconder el objeto debe ser no invasiva. No se debe enterrar. Puede ser simplemente colocado en algún sitio donde es poco probable que alguien que no conoce su ubicación lo encuentre. Otra opción son los imanes fijados a alguna superficie metálica (como las bases de las sillas de un salón de asambleas).
No se trata de predicar a los testigos. Por ello la idea no es dejar volantes escondidos para que ellos los encuentren (pensándolo bien no es mala idea, pero sería una cuestión aparte). Se supone que quien los va a encontrar conoce su ubicación al haberla leído aquí.
Podrían agregarse grados de dificultad. Por ejemplo, un tesoro en la sala de ancianos o en el departamento de contabilidad necesitaría a alguien con los mismos privilegios (o que le toque hacer el aseo allí) para encontrarlo.
Al final, quien encuentra un objeto comparte la foto en el foro para certificar el hallazgo.
La idea la encontré leyendo un libro llamado Un mapa en la cabeza, de Ken Jennings. Se habla del tema en el capítulo 10.
¿Qué ideas se les ocurren? ¿Estarían dispuestos a jugar?
No les ha pasado —a quienes aún asisten— que miran la multitud en una asamblea y se preguntan cuántos entre esos miles es como yo? Alguien más visita el foro? Cuál será su nick?
El año pasado el compañero Netineotraslapado abrió en este sentido (creo) el hilo Chateando en la Asamblea Regional
Qué es el Geocaching. Es básicamente un juego, muy antiguo por cierto, pero evoucionado a nuestros tiempos. Yo lo comparo a una búsqueda de tesoros.
Un participante esconde algún tipo de "premio o tesoro", publica su ubicación, luego quien haya visto la publicación y esté en el lugar indicado lo recoge y pone otro.
Geocaching - Wikipedia, la enciclopedia libre
https://es.wikipedia.org/wiki/Geocaching
Estrictamente el geocaching hace uso de tecnologías GPS y tiene ciertas normas específicas. La idea es adaptarlo a la realidad disidente.
Generalmente se esconde un contenedor que lleva adentro una hoja, a modo de bitácora, en donde cada visitante escribe su nombre para registrar su visita. Además se deja algún tipo de recuerdo que los demás puedan llevarse, suelen ser chucherías: botones, juguetes, monedas...
En el caso disidente podría ser un simple papelito doblado y escondido en un lugar en donde no lo saquen al primer aseo que se haga luego de terminado el programa.
Algunos jugadores del geocaching tradicional han enfrentado algunas dificultades de las que es bueno ser conscientes. Por ejemplo, han sido abordados por la policía pues se ven muy sospechosos rondando algún lugar como buscando algo o tratando de esconder algo. Otros han incurrido en vandalismo, al intentar fijar los contenedores con tornillos, silicona, perforar algún muro, colocar en lo alto de un poste eléctrico, etcétera. La norma de oro es CERO VANDALISMO.
La forma de esconder el objeto debe ser no invasiva. No se debe enterrar. Puede ser simplemente colocado en algún sitio donde es poco probable que alguien que no conoce su ubicación lo encuentre. Otra opción son los imanes fijados a alguna superficie metálica (como las bases de las sillas de un salón de asambleas).
No se trata de predicar a los testigos. Por ello la idea no es dejar volantes escondidos para que ellos los encuentren (pensándolo bien no es mala idea, pero sería una cuestión aparte). Se supone que quien los va a encontrar conoce su ubicación al haberla leído aquí.
Podrían agregarse grados de dificultad. Por ejemplo, un tesoro en la sala de ancianos o en el departamento de contabilidad necesitaría a alguien con los mismos privilegios (o que le toque hacer el aseo allí) para encontrarlo.
Al final, quien encuentra un objeto comparte la foto en el foro para certificar el hallazgo.
La idea la encontré leyendo un libro llamado Un mapa en la cabeza, de Ken Jennings. Se habla del tema en el capítulo 10.
¿Qué ideas se les ocurren? ¿Estarían dispuestos a jugar?
Ubi dubium ibi libertas (Donde hay dudas hay libertad)
"La verdad nunca teme ser examinada, la mentira sí."