02 Apr, 2022, 05:29 PM
¿Valió la pena?
Hace dos meses atrás llegue a mi límite, les dije a los ancianos de la congregación que ya no regresaré a la congregación, ignorado que iban a regresar a las reuniones presenciales, les deje en claro que ya no me tomen en cuenta en ninguna responsabilidad ni quería que me vuelvan a llamar.
Para la familia de mi esposa fue un duro golpe, ni decir para mi esposa. Me preguntaron si había hecho algo malo, si me decepcione de los ancianos y que pensara bien las cosas, que el daño que me haría y causaré al nombre de dios es más grande de lo que me imagino.
Por el momento los ancianos solo me dijeron: "ok, lo hablaremos y te diremos que opinamos al respecto". Desde ese instante no he vuelto a saber de ellos. Quisiera decir que todo es color de rosas, pero no.
Hace una semana supe que habían preguntado a un compañero de trabajo sobre mi conducta y si tengo un amorío u otro secreto que estoy ocultado. La misma pregunta le hicieron a mi esposa, solo que a ella le pidieron no decirme, para evitar problemas.
Desde que tome esa decisión, veo mi vida tan monótona, trabajar y la casa, de la casa al trabajo y así. Darte cuenta de lo vacía y como gira tu vida entorno de esta secta es algo sorprendente.
Hace dos días hablé nuevamente con mi padre, después de no hablar por más de cinco años, me alejé de él porque fue la primera persona que me dijo que estoy metido en una secta, por consejo de los ancianos de aquel entonces, podía desobedecerlo porque iba en contra de lo que dice este grupo, les hice caso. Para mí, él estaba muerto, no estuvo en mi boda, ni en mi graduación de la universidad, ni en ningún logro de mi vida, contando que recién mi esposa lo conoció hace dos días.
Hace poco leía sobre que una secta atrae víctimas y los convierte en victimarios, sin que estos mismos dejen de ser víctimas, pensar en lo que hice con mi papá me deja pensando en todas las familias destruidas y lo ciegos que estábamos. Tanto tiempo me alejé de mi familia, les di la espalda y los considere como mis enemigos por defender lo que creía que era justo.
Después de tanto dolores que les cause, mi papá solo me abrazó y me dijo que nunca me dio por perdido, la misma persona que lo pintaban como el demonio es quién mayor apoyo y comprensión me ha dado en estos días. Solo me hizo una pregunta después de ello: ¿Valió la pena?, mis hermanos crecieron, resulta que tengo sobrinos, mi hermana se casó y está embarazada, mi mamá fue operada y no lo supe. Todo eso pasó y nunca lo supe porque me asilé, el tiempo pasa y es duro darse cuenta que no estuve allí, quisiera recuperar ese tiempo, pero solo me queda aprovechar el tiempo.
Hace unos minutos mi esposa salió de casa con dirección al salón del reino, y me rompí a llorar, saber que los que amas están dentro de una jaula y lo único que puedes hacer es observar, concientizar y esperar, se ha vuelto una tortura. Puedo entender mejor la angustia que muchos han compartido en el foro, la incertidumbre por el mañana y la rabia por ver todo el daño que ha causado esta secta.
Sé que mi camino de recuperarme es lento, pero algo tengo bastante claro y es que regresar y causar más dolor ya no es una opción. Miro a los que están fuera y comparto su dolor, solo deseando que un día paguen y si de verdad existe el dios que tanto se predica, que haga la justicia que tanto se predica.
Hace dos meses atrás llegue a mi límite, les dije a los ancianos de la congregación que ya no regresaré a la congregación, ignorado que iban a regresar a las reuniones presenciales, les deje en claro que ya no me tomen en cuenta en ninguna responsabilidad ni quería que me vuelvan a llamar.
Para la familia de mi esposa fue un duro golpe, ni decir para mi esposa. Me preguntaron si había hecho algo malo, si me decepcione de los ancianos y que pensara bien las cosas, que el daño que me haría y causaré al nombre de dios es más grande de lo que me imagino.
Por el momento los ancianos solo me dijeron: "ok, lo hablaremos y te diremos que opinamos al respecto". Desde ese instante no he vuelto a saber de ellos. Quisiera decir que todo es color de rosas, pero no.
Hace una semana supe que habían preguntado a un compañero de trabajo sobre mi conducta y si tengo un amorío u otro secreto que estoy ocultado. La misma pregunta le hicieron a mi esposa, solo que a ella le pidieron no decirme, para evitar problemas.
Desde que tome esa decisión, veo mi vida tan monótona, trabajar y la casa, de la casa al trabajo y así. Darte cuenta de lo vacía y como gira tu vida entorno de esta secta es algo sorprendente.
Hace dos días hablé nuevamente con mi padre, después de no hablar por más de cinco años, me alejé de él porque fue la primera persona que me dijo que estoy metido en una secta, por consejo de los ancianos de aquel entonces, podía desobedecerlo porque iba en contra de lo que dice este grupo, les hice caso. Para mí, él estaba muerto, no estuvo en mi boda, ni en mi graduación de la universidad, ni en ningún logro de mi vida, contando que recién mi esposa lo conoció hace dos días.
Hace poco leía sobre que una secta atrae víctimas y los convierte en victimarios, sin que estos mismos dejen de ser víctimas, pensar en lo que hice con mi papá me deja pensando en todas las familias destruidas y lo ciegos que estábamos. Tanto tiempo me alejé de mi familia, les di la espalda y los considere como mis enemigos por defender lo que creía que era justo.
Después de tanto dolores que les cause, mi papá solo me abrazó y me dijo que nunca me dio por perdido, la misma persona que lo pintaban como el demonio es quién mayor apoyo y comprensión me ha dado en estos días. Solo me hizo una pregunta después de ello: ¿Valió la pena?, mis hermanos crecieron, resulta que tengo sobrinos, mi hermana se casó y está embarazada, mi mamá fue operada y no lo supe. Todo eso pasó y nunca lo supe porque me asilé, el tiempo pasa y es duro darse cuenta que no estuve allí, quisiera recuperar ese tiempo, pero solo me queda aprovechar el tiempo.
Hace unos minutos mi esposa salió de casa con dirección al salón del reino, y me rompí a llorar, saber que los que amas están dentro de una jaula y lo único que puedes hacer es observar, concientizar y esperar, se ha vuelto una tortura. Puedo entender mejor la angustia que muchos han compartido en el foro, la incertidumbre por el mañana y la rabia por ver todo el daño que ha causado esta secta.
Sé que mi camino de recuperarme es lento, pero algo tengo bastante claro y es que regresar y causar más dolor ya no es una opción. Miro a los que están fuera y comparto su dolor, solo deseando que un día paguen y si de verdad existe el dios que tanto se predica, que haga la justicia que tanto se predica.