06 Feb, 2018, 09:11 PM
Hola foristas! Hermanos, ex hermanos, compañeros traslapados de generación de las que alguna vez fueron mis creencias. Trataré de presentar parte de lo que ha sido mi vida, espero no aburrirles.
Desde hace un tiempo he vuelto a leer los foros, a decir verdad, pase por un período de muchos sueños y con ganas de regresar a ser TJ. Quizás por la lejanía de mi familia o porque es lo único que he conocido, pero al leer acá me doy cuenta de que he hecho bien y estoy más feliz y tranquilo al estar alejado.
Nací en un lugar x de la zona centro de Chile. Mi madre y parte de mi familia conocieron la "verdad" mucho antes de mí existencia. Mis padres se separaron antes de mí nacimiento y por circunstancias familiares y de entorno me crié bastante solo, tuve una diferencia de edad significativa con mis hermanos y primos, por lo que mi crianza fue entre libros, jardines, y por supuesto atalayas y despertad! En esos años aún no se miraba con tanta mala fama los estudios superiores, así que mi madre con mucho esfuerzo y trabajo logro educar a mis hermanas. Éramos de un barrio casi de campo pero nunca falto nada en casa, salvo tener a mis padres cerca.
Desde niño fui llevado a las reuniones y hasta cierto punto me gustaban, habían niños de mi edad y podía comentar una que otra cosa, me encantaba leer libros de todo tipo y leer revistas WT , ame la Biblia y mi mini Biblioteca donde pasaba horas jugando.
Mis únicos puntos de duda hasta los 7 años fueron que no concebía que mi madre debía a salir a predicar el único día que tenía libre y para rematar había que asistir a reunión. Aveces lloraba al ver que despertaba y ella ya había salido a predicar y en esos momentos no podía entender cómo se iba y no aprovechaba de estar conmigo. Crecí y con el tiempo empecé a salir a predicar también y convertirme poco a poco en un joven "Timoteo" a los ojos de la congregación.
Con respecto a cumpleaños, solo recuerdo alguna que otra llamada y algún regalo de algún familiar no testigo, no los extrañe realmente, supongo que leer tanto "mi libro de historias bíblicas" temía la muerte de cualquiera que incluso cantase el cumpleaños feliz jaja. Lo mismo para la navidad y año nuevo, aunque recibía regalos siempre miraba con nostalgia los arbolitos de pascua y las cenas familiares, me bastaba tener a mi familia en esos momentos aunque fuera otro día más del año. Hoy ya de adulto, si bien no he celebrado mi cumpleaños con bombos, he podido participar en algunos e incluso llevo dos años armando mi propio arbolito de navidad, ( me gusta ver las luces brillando en la noche![[Imagen: smile.png]](https://ci4.googleusercontent.com/proxy/HaeKbjebvPKtsThu6uPzfhsB7JtQFYLCm6j9IdbbGXQBkf-5q-6pPqGgK7GkEaohHoKvOCuJpxkz0qx43rxwharONQ=s0-d-e1-ft#https://extj.co/foro/images/smilies/smile.png)
) ya no es motivo de pesar en mi..
De niño fui diferente, no me gustaba el futbol ni los intereses comunes de un niñito...prefería mis peluches y leer, siempre fui intuitivo y sensible a las cosas, me afectaba que una de mis hermanas estuviera expulsada y lloraba al pensar que no estaría en el paraíso conmigo. Algo bastante duro si miro atrás y me veo a los cinco años pensando en estas cosas.
Soy gay, y nací simplemente así, de niño lo sabía pero lo oculte siempre. Por razones particulares madure rápidamente tanto así que lograba visualizar lo que pasaría más adelante y el gran problema que se vendría encima. Sin embargo, me propuse servir a Jehová pase lo que pase y en mi dedicación le dije que al menos le serviría renunciando incluso a mi mismo, pretendí ser feliz por el hecho de ser su testigo, supongo que fue un sentimiento tan puro de amor incondicional , que sabía que al ser así no estaría en el paraíso, más, mi conformidad era servir a Dios y eso fue lo más importante para mí, me daba igual morir en el Armagedón (hasta en ese sentido fui diferente... no me bautice por jugar con leones o conocer a mis abuelos muertos o disfrutar de un hermoso jardín, sino por servir a Jehová sin importar si el me eliminaba junto a este sistema). Dije el sí, a los 11 años.
En esos años (90) era un entorno cultural poco abierto, sufrí bulling por ser el niño "rarito" "educado" o "afeminado" y ademas por ser parte de la "secta que no acepta transfusiones, que no celebra navidad ni cumpleaños ni que van a fiestas". Siempre estuve muy solo, ya que como todos saben un niño TJ por razones obvias no participa en cosas que cualquier niño normal. Menos me juntaba con los hermanos porque si bien, podía soportar la burla o bromas desagradables de los "mundanos", me partía el corazón escucharlas de mis propios "hermanos en la fe". En esos años lo único que sabían hacer era juntarse a jugar a la pelota y predicar, entre ambas escogí la segunda.
Pase a anotarme para precursor auxiliar durante los veranos( 60 hrs), y durante el año predicaba los fin de semana, tuve un par de estudios biblicos y en realidad era la caricatura perfecta de un niño ejemplo de revista Atalaya. Al ir entrando a la adolescencia le pedí a Jehová que me diera "privilegios" quería ser "útil" a la "organización". Desde los 13 años ayudaba en micrófonos, acomodación y pronto ya me encontraba leyendo la atalaya, el libro de turno en el estudio de libro, en sonido y literatura. Yo era feliz sirviendo, llegando temprano a ordenar, hacer aseo, y entregando revistas, me mantuve ocupado y firme, ganando el cariño y siguiendo los consejos de hermanos bien intencionados que me animaban. Aunque no tenía una meta de Betel ni misionero (doy gracias a mi madre, por criarme con los pies en la tierra), si quería llegar a ser anciano y apoyar en las cosas que veía falencias. " Era uno de los jóvenes espirituales", pero siempre en humildad nunca me gusto comentar más de una vez ni que me alagaran por mis discursos 2 -4 de aquellos años, (sí, en ese tiempo no sólo era leer un capítulo, había que crear introducción y conclusión. El discurso 4, desarrollar un tema x en 5 minutos de acuerdo a un programa), en fin, ser un joven espiritual de libro subrayado y comentario adicional.
Todo iba bien, aunque siempre me mantenía limitado de tener amistad con los hermanos y hermanas, por temor a que me rechazaran, pero como la vida es sabía, un buen día llegó el verdugo que abriría mis ojos. Era un superintendente viajante de los "antiguos y de vieja escuela, los mañosos y enojones, alto, serio y de apariencia de gerente general", hasta ese entonces, todos super que conocía eran bastante simpáticos y buena gente pero "celosos" por la organización, veía esas visitas como un estímulo potente. Esa visita fue diferente, un tipo golpeador, arrogante y con los humos por el cielo, hizo y deshizo. Yo estaba en la sala de sonido, cuando dio el discurso que Jehová mediante su "organización" daba a los hermanos, se refirió en duros terminos de la homosexualidad diciendo que era la basura mas asquerosa y poco le falto decir que la gente así era detestable... lloré los 50 minutos del discurso dentro de la sala de sonido, ¿Cómo era posible que Jehová utilizara a uno de los "mejores" hombres para expresarse así? ¿De que valía esforzarme tanto, si al final iba a morir? ¿Quién m32rd1 era la famosa "organización" que firmaban cartas, libros y otros como "sus queridos hermanos" y nunca daban la cara? ¿Por que nací así, es el castigo que merezco, mi espina en la carne? .. 15 años y un revoltijo de emociones y mi vida se venía abajo estrepitosamente, pensé en matarme.
En mi mente solitaria pensaba y le daba vuelta al asunto, por primera vez me sentía sucio, asqueroso de ser quien era. Ni siquiera por un tema sexual o de descubrimiento, me odiaba porque Jehova odiaba mi esencia, entré en una depresión fuerte, en apariencia era uno, pero todas las noches lloraba y me golpeaba, no tenía con quien hablar, temía que me juzgaran, tampoco quería recurrir al mundo. Fue una adolescencia oscura, fría y mecánica. Decidí buscar información, leí mucha pero nada, mis sentimientos seguían ahí.
En una oportunidad, en una reunión social, de esas que uno aprovecha para comer cositas ricas y reir un poco, varios hermanos comentaron el libro con el cual se bautizaron, "bomba azul", "vivir para siempre", "conocimiento", y el más nuevito "enseña". Algo retumbo en mi mente, una hermana muy querida menciono el libro "Disfrute". Recordé inmediatamente aquel libro antiguo de tapa anaranjada nada que ver con el "apocalipsis" y sus fuertes ilustraciones. Era un libro de ilustraciones bonitas y en blanco y negro, recuerdo de niño pequeño haber preguntado por el y mi mamá me dijo dijo que estaba obsoleto y que ya no se utilizaba por que era muy antiguo, me dio pena porque lo encontraba muy lindo, le consulté en ese entonces y me dijo que Jehová iliuminaba a su organización con "nuevas verdades". Tras ese breve flasback, pensé .. Si Jehová es el Dios de la verdad, ¿Porqué razón esta debe ir mutando década tras década, si la verdad es una sola...? empecé a investigar y leer con otros ojos la literatura, primer gran descubrimiento... 1914 y la famosa generación, lo peor que ellos mismos lo reconocen y culpan a los hermanos de a pie por creer otras cosas y apresurarse a la verdad. En los estudios y reuniones en generales todo el mundo repetía como loro las preguntas y respuestas sin siquiera analizar lo que leían o por último dar un análisis serio o razonable, ¿Cómo es posible estar tan ciego?
No me parecía estar en una organización que permite a los "hermanos del cuerpo gobernante" equivocarse para ser mas "humildes", o ser muy "entusiastas" con las "verdades", para luego cambiarlas y que uno lo repita sin pensar libros enteros y que al final eran cambiados por nuevas "luces". Empecé a dudar, pero pensaba que mi primer propósito era servir a Jehová y con eso me bastaba.
Conforme fui llegando a los 18, querían que yo fuese siervo ministerial. De las labores de uno de ellos, lo único que no hacía era dar discursos públicos. Incluso reemplazaba al conductor del estudio de libro jaja. Con toda mi depresión y mareo interno, no quería nada. Pero los ancianos me presionaban por ser precursor (incluso llegaron a decirme que si lo era sería SM en la siguiente visita), por mi pelo, por si comentaba poco, pusieron hasta un tutor para motivarme pero yo seguía igual, dando lo mismo de siempre. Aveces me atrasaba en los informes y me empezó a molestar su actitud,lo único que les importaba a los ancianos era adular al superintendente de turno y mantener el promedio de la congregación, pensé que para que era necesario "informar" si uno muchas veces no hablaba con nadie, no predicaba ni para dar testimonio.. fue así que llegué al foro de los Fuentes. No había base bíblica para informar, pero ¿Que pasa? ¿Estoy en un foro apóstata, ahora si que las c@gu$ !! moriré por visitar un sitio apostata y por tener sentimientos gay, y dudar de informar? Inmediatamente me aleje de esto.
El mismo año que salí de cuarto medio, comenzó la cruzada por no ir a los estudios superiores. Si bien, no me fue excelente en la prueba de admisión, logré quedar en una carrera dentro de una universidad buena y reconocida, ingreso que rechacé por temor a desobedecer el consejo del "esclavo" y preferí estudiar una carrera corta técnica. Por años lo ví como un error, pero todo pasa por algo y asumo mis responsabilidades personales y crecimiento en el momento que debe ser.
En el instituto conocí amistades que me escucharon, me apoyaron y por primera vez sentí que, aunque no quería desprestigiar a los Tj, existía el sentido común fuera de la organización y un interés sincero. Me animé a hablar con los ancianos y decirle sobre mis sentimientos y por primera vez solicitar su ayuda. Me escucharon, vi sus rostros, el más nuevo "feliz" con mi caso, era "entretenido" por primera vez algo así al menos en esa congregación. Busque ayuda, me ofrecierón el cielo y dicha ayuda nunca llegó. Un apretón de manos y nada más, me sentí bien una semana y luego fue peor, me sentí ridículo al contar mis sentimientos íntimos y que te den un "buscaremos información", seguramente pensáron que era una confusión interior y que se me pasaría.
Pasaron los meses, finalmente mi espiritualidad se fue bien lejos, egrese luego de dos años y medio y comencé a trabajar, a los pocos meses experimente y "pequé".
Hable nuevamente, pienso que no me expulsaron, porque se las canté claritas, me hice responsable de mis errores y asumí mis culpas, aún así me sentía atado a ser TJ, pensaba en volver pero necesitaba una disciplina. Ellos no me expulsaron quizá porque sintieron que no me acompañaron lo suficiente, tampoco volví a recibir ayuda de su parte. Si bien no me censuraron públicamente, la mayoría se entero misteriosamente y me miraban con pena o ignoraban. Me dolía al ver a personas a quienes apreciaba que se comportasen así, fue ahí donde me empecé a fijar en los débiles, las hermanas mayores, los ignorados y desde mi "aún" existente "hermandad" fui hermano de ellos, los saludaba y me interesaba siempre por ellos, conocí a muy buenas personas y sinceras, aprendí el verdadero cristianismo, me daban igual los " más espirituales".
Comencé a frecuentar nuevamente los foros y blogs, empecé a predicar únicamente con la Biblia y ha hacer el mínimo. La vida hizo que por trabajo me fuera de la ciudad, fue entonces, antes del cambio, que recibí un pastoreo de dos ancianos uno que estuvo presente en mi comité y otro era "un anciono nuevo asignado" hacía dos meses a la congregación. El que habló fue el "nuevo", me dio e insinuó tantos detalles de mi vida privada que era obvio que estaba al tanto de todo mi proceso. Lo escuche respetuosamente, le dí las gracias pero sabía que simplemente era un tipo más engañado por la secta, y me dio rabia que si ni mi familia sabía tanto de mi ¿como re diablos él estaba enterado de todo!? ¿ Donde quedó el asunto confidencial? Jajaja en mis registros...por supuesto.
Intenté seguir en la nueva ciudad, pero era todo exactamente igual, los mismos "matrimonios ejemplares", los mismos "dar el máximo", los mismos "aportar más a la obra", los "mismos depresivos", los "mismos doble estándar" y no tenía las más mínima intención que gente que no me interesaba en lo más mínimo me juzgara al conocer mi registro de publicador.
De los 24 en adelante comencé el trabajo de desprogramación, es difícil sábes? Han pasado 5 años que estoy inactivo, que no asisto ni me interesa volver, todo lo que conozco de mi infacia y adolescencia fue marcada a fuego por creencias que asumí como verdades, por querer servir al Dios de la WT. He pasado por momentos muy duros y felices, pero no me arrepiento, he conocido el amor dentro de mí, donde antes había temor. He conocido a un Dios que ama por quien somos no por lo que le damos, he apreciado y valorado mi vida. Es un proceso largo, que pocos o nadie entiende, sólo los que hemos pasado por lo mismo. He aprendido a amar quien soy, a ver mis virtudes y sanarme, no tengo idea cuanto ni cómo va a durar este proceso, a ratos deseo volver pero por mi familia, luego digo no, estoy yo antes y la lealtad a mi primero.
La marca emocional es fuerte, la propaganda de falsa felicidad y de familias ideales dentro de la WT es tan intensa que nunca te sientes capaz, suficiente, adecuado. Espero un día estar con todas mis partes completas, ver esto como el aprendizaje que elegí vivir. No culpo a los TJ de a pie, pero si hay intereses malevolos, codiciosos y egoístas tras la organización.
Gracias a la vida por enseñarme a que puedo estudiar sin sentir culpa, a que puedo amar sin sentir miedo, a que puedo aceptarme, a hacerme responsable como ser humano de mi vida, y de los aprendizajes del alma. Infinitas gracias a tí, que te diste el tiempo de leer y compartir memorias conmigo, seguramente nos emocionamos juntos al ver algún drama, o cántico, anhelamos un paraíso, una familia ideal o ejemplar, conocimos a ratos el amor y la felicidad de un compañerismo, de regalar a nuestro modo algo de esperanza a alguien, a hacer algo que nadie se enteró ni valoró y aun así hicimos lo que debímos haber hecho, al sentir amor incondicional a un ser supremo, de ayudar a un hermano mayor o a quien nos necesitase, de enseñar algo positivo, también sufrimos juntos, lloramos traiciones, deslealtades, fuimos más allá al poner al otro sobre nosotros mismos para no dar causa de tropiezo, nos desilusionamos y nos enojamos, abrimos los ojos.
Sinceramente creo que todos somos diferentes y tenemos mil caminos por delante y somos quienes decidimos nuestro futuro, no soy quien para interponerme en el camino vital de alguien, pero ya que estoy acá ofrezco mi cariño, amor y también las disculpas si alguna vez herí a algún hermanit@ con algún comentario o actitud sin saber el universo que viven dentro de sí. Aprendí a amar la luz y la sombra y la dualidad de las cosas, es por eso que estoy agradecido, porque quiero más, quiero crecer y no estancarme ni ponerme obstáculos, pero debo limpiar mi mente de la programación y tras años y años, dentro de mi, la esponja neuronal de infante absorbió bastantes cosas ajaja. Gracias nuevamente y espero ser de utilidad y acompañamiento en este foro para quien lo desee.
Un abrazo infinito!
Desde hace un tiempo he vuelto a leer los foros, a decir verdad, pase por un período de muchos sueños y con ganas de regresar a ser TJ. Quizás por la lejanía de mi familia o porque es lo único que he conocido, pero al leer acá me doy cuenta de que he hecho bien y estoy más feliz y tranquilo al estar alejado.
Nací en un lugar x de la zona centro de Chile. Mi madre y parte de mi familia conocieron la "verdad" mucho antes de mí existencia. Mis padres se separaron antes de mí nacimiento y por circunstancias familiares y de entorno me crié bastante solo, tuve una diferencia de edad significativa con mis hermanos y primos, por lo que mi crianza fue entre libros, jardines, y por supuesto atalayas y despertad! En esos años aún no se miraba con tanta mala fama los estudios superiores, así que mi madre con mucho esfuerzo y trabajo logro educar a mis hermanas. Éramos de un barrio casi de campo pero nunca falto nada en casa, salvo tener a mis padres cerca.
Desde niño fui llevado a las reuniones y hasta cierto punto me gustaban, habían niños de mi edad y podía comentar una que otra cosa, me encantaba leer libros de todo tipo y leer revistas WT , ame la Biblia y mi mini Biblioteca donde pasaba horas jugando.
Mis únicos puntos de duda hasta los 7 años fueron que no concebía que mi madre debía a salir a predicar el único día que tenía libre y para rematar había que asistir a reunión. Aveces lloraba al ver que despertaba y ella ya había salido a predicar y en esos momentos no podía entender cómo se iba y no aprovechaba de estar conmigo. Crecí y con el tiempo empecé a salir a predicar también y convertirme poco a poco en un joven "Timoteo" a los ojos de la congregación.
Con respecto a cumpleaños, solo recuerdo alguna que otra llamada y algún regalo de algún familiar no testigo, no los extrañe realmente, supongo que leer tanto "mi libro de historias bíblicas" temía la muerte de cualquiera que incluso cantase el cumpleaños feliz jaja. Lo mismo para la navidad y año nuevo, aunque recibía regalos siempre miraba con nostalgia los arbolitos de pascua y las cenas familiares, me bastaba tener a mi familia en esos momentos aunque fuera otro día más del año. Hoy ya de adulto, si bien no he celebrado mi cumpleaños con bombos, he podido participar en algunos e incluso llevo dos años armando mi propio arbolito de navidad, ( me gusta ver las luces brillando en la noche
) ya no es motivo de pesar en mi..De niño fui diferente, no me gustaba el futbol ni los intereses comunes de un niñito...prefería mis peluches y leer, siempre fui intuitivo y sensible a las cosas, me afectaba que una de mis hermanas estuviera expulsada y lloraba al pensar que no estaría en el paraíso conmigo. Algo bastante duro si miro atrás y me veo a los cinco años pensando en estas cosas.
Soy gay, y nací simplemente así, de niño lo sabía pero lo oculte siempre. Por razones particulares madure rápidamente tanto así que lograba visualizar lo que pasaría más adelante y el gran problema que se vendría encima. Sin embargo, me propuse servir a Jehová pase lo que pase y en mi dedicación le dije que al menos le serviría renunciando incluso a mi mismo, pretendí ser feliz por el hecho de ser su testigo, supongo que fue un sentimiento tan puro de amor incondicional , que sabía que al ser así no estaría en el paraíso, más, mi conformidad era servir a Dios y eso fue lo más importante para mí, me daba igual morir en el Armagedón (hasta en ese sentido fui diferente... no me bautice por jugar con leones o conocer a mis abuelos muertos o disfrutar de un hermoso jardín, sino por servir a Jehová sin importar si el me eliminaba junto a este sistema). Dije el sí, a los 11 años.
En esos años (90) era un entorno cultural poco abierto, sufrí bulling por ser el niño "rarito" "educado" o "afeminado" y ademas por ser parte de la "secta que no acepta transfusiones, que no celebra navidad ni cumpleaños ni que van a fiestas". Siempre estuve muy solo, ya que como todos saben un niño TJ por razones obvias no participa en cosas que cualquier niño normal. Menos me juntaba con los hermanos porque si bien, podía soportar la burla o bromas desagradables de los "mundanos", me partía el corazón escucharlas de mis propios "hermanos en la fe". En esos años lo único que sabían hacer era juntarse a jugar a la pelota y predicar, entre ambas escogí la segunda.
Pase a anotarme para precursor auxiliar durante los veranos( 60 hrs), y durante el año predicaba los fin de semana, tuve un par de estudios biblicos y en realidad era la caricatura perfecta de un niño ejemplo de revista Atalaya. Al ir entrando a la adolescencia le pedí a Jehová que me diera "privilegios" quería ser "útil" a la "organización". Desde los 13 años ayudaba en micrófonos, acomodación y pronto ya me encontraba leyendo la atalaya, el libro de turno en el estudio de libro, en sonido y literatura. Yo era feliz sirviendo, llegando temprano a ordenar, hacer aseo, y entregando revistas, me mantuve ocupado y firme, ganando el cariño y siguiendo los consejos de hermanos bien intencionados que me animaban. Aunque no tenía una meta de Betel ni misionero (doy gracias a mi madre, por criarme con los pies en la tierra), si quería llegar a ser anciano y apoyar en las cosas que veía falencias. " Era uno de los jóvenes espirituales", pero siempre en humildad nunca me gusto comentar más de una vez ni que me alagaran por mis discursos 2 -4 de aquellos años, (sí, en ese tiempo no sólo era leer un capítulo, había que crear introducción y conclusión. El discurso 4, desarrollar un tema x en 5 minutos de acuerdo a un programa), en fin, ser un joven espiritual de libro subrayado y comentario adicional.
Todo iba bien, aunque siempre me mantenía limitado de tener amistad con los hermanos y hermanas, por temor a que me rechazaran, pero como la vida es sabía, un buen día llegó el verdugo que abriría mis ojos. Era un superintendente viajante de los "antiguos y de vieja escuela, los mañosos y enojones, alto, serio y de apariencia de gerente general", hasta ese entonces, todos super que conocía eran bastante simpáticos y buena gente pero "celosos" por la organización, veía esas visitas como un estímulo potente. Esa visita fue diferente, un tipo golpeador, arrogante y con los humos por el cielo, hizo y deshizo. Yo estaba en la sala de sonido, cuando dio el discurso que Jehová mediante su "organización" daba a los hermanos, se refirió en duros terminos de la homosexualidad diciendo que era la basura mas asquerosa y poco le falto decir que la gente así era detestable... lloré los 50 minutos del discurso dentro de la sala de sonido, ¿Cómo era posible que Jehová utilizara a uno de los "mejores" hombres para expresarse así? ¿De que valía esforzarme tanto, si al final iba a morir? ¿Quién m32rd1 era la famosa "organización" que firmaban cartas, libros y otros como "sus queridos hermanos" y nunca daban la cara? ¿Por que nací así, es el castigo que merezco, mi espina en la carne? .. 15 años y un revoltijo de emociones y mi vida se venía abajo estrepitosamente, pensé en matarme.
En mi mente solitaria pensaba y le daba vuelta al asunto, por primera vez me sentía sucio, asqueroso de ser quien era. Ni siquiera por un tema sexual o de descubrimiento, me odiaba porque Jehova odiaba mi esencia, entré en una depresión fuerte, en apariencia era uno, pero todas las noches lloraba y me golpeaba, no tenía con quien hablar, temía que me juzgaran, tampoco quería recurrir al mundo. Fue una adolescencia oscura, fría y mecánica. Decidí buscar información, leí mucha pero nada, mis sentimientos seguían ahí.
En una oportunidad, en una reunión social, de esas que uno aprovecha para comer cositas ricas y reir un poco, varios hermanos comentaron el libro con el cual se bautizaron, "bomba azul", "vivir para siempre", "conocimiento", y el más nuevito "enseña". Algo retumbo en mi mente, una hermana muy querida menciono el libro "Disfrute". Recordé inmediatamente aquel libro antiguo de tapa anaranjada nada que ver con el "apocalipsis" y sus fuertes ilustraciones. Era un libro de ilustraciones bonitas y en blanco y negro, recuerdo de niño pequeño haber preguntado por el y mi mamá me dijo dijo que estaba obsoleto y que ya no se utilizaba por que era muy antiguo, me dio pena porque lo encontraba muy lindo, le consulté en ese entonces y me dijo que Jehová iliuminaba a su organización con "nuevas verdades". Tras ese breve flasback, pensé .. Si Jehová es el Dios de la verdad, ¿Porqué razón esta debe ir mutando década tras década, si la verdad es una sola...? empecé a investigar y leer con otros ojos la literatura, primer gran descubrimiento... 1914 y la famosa generación, lo peor que ellos mismos lo reconocen y culpan a los hermanos de a pie por creer otras cosas y apresurarse a la verdad. En los estudios y reuniones en generales todo el mundo repetía como loro las preguntas y respuestas sin siquiera analizar lo que leían o por último dar un análisis serio o razonable, ¿Cómo es posible estar tan ciego?
No me parecía estar en una organización que permite a los "hermanos del cuerpo gobernante" equivocarse para ser mas "humildes", o ser muy "entusiastas" con las "verdades", para luego cambiarlas y que uno lo repita sin pensar libros enteros y que al final eran cambiados por nuevas "luces". Empecé a dudar, pero pensaba que mi primer propósito era servir a Jehová y con eso me bastaba.
Conforme fui llegando a los 18, querían que yo fuese siervo ministerial. De las labores de uno de ellos, lo único que no hacía era dar discursos públicos. Incluso reemplazaba al conductor del estudio de libro jaja. Con toda mi depresión y mareo interno, no quería nada. Pero los ancianos me presionaban por ser precursor (incluso llegaron a decirme que si lo era sería SM en la siguiente visita), por mi pelo, por si comentaba poco, pusieron hasta un tutor para motivarme pero yo seguía igual, dando lo mismo de siempre. Aveces me atrasaba en los informes y me empezó a molestar su actitud,lo único que les importaba a los ancianos era adular al superintendente de turno y mantener el promedio de la congregación, pensé que para que era necesario "informar" si uno muchas veces no hablaba con nadie, no predicaba ni para dar testimonio.. fue así que llegué al foro de los Fuentes. No había base bíblica para informar, pero ¿Que pasa? ¿Estoy en un foro apóstata, ahora si que las c@gu$ !! moriré por visitar un sitio apostata y por tener sentimientos gay, y dudar de informar? Inmediatamente me aleje de esto.
El mismo año que salí de cuarto medio, comenzó la cruzada por no ir a los estudios superiores. Si bien, no me fue excelente en la prueba de admisión, logré quedar en una carrera dentro de una universidad buena y reconocida, ingreso que rechacé por temor a desobedecer el consejo del "esclavo" y preferí estudiar una carrera corta técnica. Por años lo ví como un error, pero todo pasa por algo y asumo mis responsabilidades personales y crecimiento en el momento que debe ser.
En el instituto conocí amistades que me escucharon, me apoyaron y por primera vez sentí que, aunque no quería desprestigiar a los Tj, existía el sentido común fuera de la organización y un interés sincero. Me animé a hablar con los ancianos y decirle sobre mis sentimientos y por primera vez solicitar su ayuda. Me escucharon, vi sus rostros, el más nuevo "feliz" con mi caso, era "entretenido" por primera vez algo así al menos en esa congregación. Busque ayuda, me ofrecierón el cielo y dicha ayuda nunca llegó. Un apretón de manos y nada más, me sentí bien una semana y luego fue peor, me sentí ridículo al contar mis sentimientos íntimos y que te den un "buscaremos información", seguramente pensáron que era una confusión interior y que se me pasaría.
Pasaron los meses, finalmente mi espiritualidad se fue bien lejos, egrese luego de dos años y medio y comencé a trabajar, a los pocos meses experimente y "pequé".
Hable nuevamente, pienso que no me expulsaron, porque se las canté claritas, me hice responsable de mis errores y asumí mis culpas, aún así me sentía atado a ser TJ, pensaba en volver pero necesitaba una disciplina. Ellos no me expulsaron quizá porque sintieron que no me acompañaron lo suficiente, tampoco volví a recibir ayuda de su parte. Si bien no me censuraron públicamente, la mayoría se entero misteriosamente y me miraban con pena o ignoraban. Me dolía al ver a personas a quienes apreciaba que se comportasen así, fue ahí donde me empecé a fijar en los débiles, las hermanas mayores, los ignorados y desde mi "aún" existente "hermandad" fui hermano de ellos, los saludaba y me interesaba siempre por ellos, conocí a muy buenas personas y sinceras, aprendí el verdadero cristianismo, me daban igual los " más espirituales".
Comencé a frecuentar nuevamente los foros y blogs, empecé a predicar únicamente con la Biblia y ha hacer el mínimo. La vida hizo que por trabajo me fuera de la ciudad, fue entonces, antes del cambio, que recibí un pastoreo de dos ancianos uno que estuvo presente en mi comité y otro era "un anciono nuevo asignado" hacía dos meses a la congregación. El que habló fue el "nuevo", me dio e insinuó tantos detalles de mi vida privada que era obvio que estaba al tanto de todo mi proceso. Lo escuche respetuosamente, le dí las gracias pero sabía que simplemente era un tipo más engañado por la secta, y me dio rabia que si ni mi familia sabía tanto de mi ¿como re diablos él estaba enterado de todo!? ¿ Donde quedó el asunto confidencial? Jajaja en mis registros...por supuesto.
Intenté seguir en la nueva ciudad, pero era todo exactamente igual, los mismos "matrimonios ejemplares", los mismos "dar el máximo", los mismos "aportar más a la obra", los "mismos depresivos", los "mismos doble estándar" y no tenía las más mínima intención que gente que no me interesaba en lo más mínimo me juzgara al conocer mi registro de publicador.
De los 24 en adelante comencé el trabajo de desprogramación, es difícil sábes? Han pasado 5 años que estoy inactivo, que no asisto ni me interesa volver, todo lo que conozco de mi infacia y adolescencia fue marcada a fuego por creencias que asumí como verdades, por querer servir al Dios de la WT. He pasado por momentos muy duros y felices, pero no me arrepiento, he conocido el amor dentro de mí, donde antes había temor. He conocido a un Dios que ama por quien somos no por lo que le damos, he apreciado y valorado mi vida. Es un proceso largo, que pocos o nadie entiende, sólo los que hemos pasado por lo mismo. He aprendido a amar quien soy, a ver mis virtudes y sanarme, no tengo idea cuanto ni cómo va a durar este proceso, a ratos deseo volver pero por mi familia, luego digo no, estoy yo antes y la lealtad a mi primero.
La marca emocional es fuerte, la propaganda de falsa felicidad y de familias ideales dentro de la WT es tan intensa que nunca te sientes capaz, suficiente, adecuado. Espero un día estar con todas mis partes completas, ver esto como el aprendizaje que elegí vivir. No culpo a los TJ de a pie, pero si hay intereses malevolos, codiciosos y egoístas tras la organización.
Gracias a la vida por enseñarme a que puedo estudiar sin sentir culpa, a que puedo amar sin sentir miedo, a que puedo aceptarme, a hacerme responsable como ser humano de mi vida, y de los aprendizajes del alma. Infinitas gracias a tí, que te diste el tiempo de leer y compartir memorias conmigo, seguramente nos emocionamos juntos al ver algún drama, o cántico, anhelamos un paraíso, una familia ideal o ejemplar, conocimos a ratos el amor y la felicidad de un compañerismo, de regalar a nuestro modo algo de esperanza a alguien, a hacer algo que nadie se enteró ni valoró y aun así hicimos lo que debímos haber hecho, al sentir amor incondicional a un ser supremo, de ayudar a un hermano mayor o a quien nos necesitase, de enseñar algo positivo, también sufrimos juntos, lloramos traiciones, deslealtades, fuimos más allá al poner al otro sobre nosotros mismos para no dar causa de tropiezo, nos desilusionamos y nos enojamos, abrimos los ojos.
Sinceramente creo que todos somos diferentes y tenemos mil caminos por delante y somos quienes decidimos nuestro futuro, no soy quien para interponerme en el camino vital de alguien, pero ya que estoy acá ofrezco mi cariño, amor y también las disculpas si alguna vez herí a algún hermanit@ con algún comentario o actitud sin saber el universo que viven dentro de sí. Aprendí a amar la luz y la sombra y la dualidad de las cosas, es por eso que estoy agradecido, porque quiero más, quiero crecer y no estancarme ni ponerme obstáculos, pero debo limpiar mi mente de la programación y tras años y años, dentro de mi, la esponja neuronal de infante absorbió bastantes cosas ajaja. Gracias nuevamente y espero ser de utilidad y acompañamiento en este foro para quien lo desee.
Un abrazo infinito!
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