[Demofonte]

Es deleznable y terrible, que desde la Watchtower se persista en decir que la expulsión es una medida de amor. Más bien, es una medida coercitiva, que mata y entierra en vida a la persona que es expulsada. Es inhumano que se aliente a los Testigos de Jehová a que dejen de hablar a quien se expulsa, aunque sean sus propios padres, hijos o hermanos. Son destructores natos de familias. Esta clase de medidas, tal y como se puede ver, solo causa dolor, además de perturbaciones mentales a quien padece problemas emocionales.

Hay quien lo sobrelleva mejor que otros, pero en cualquier caso, cuando se expulsa a alguien, esa persona se ve obligada a hacer cambios en su vida, en sus amistades, en su trato con su familia Testigo. Máxime cuando lleva metido toda la vida en esta secta.

Recuerdo una cita de Steven Hassan que venía a decir: "En una secta destructiva nunca existe una razón legítima para marcharse. Los grupos que practican el control mental afirman que no existe el modo legítimo de abandonarlos. Y que si lo dejan, es porque han sido tentados por el Diablo, por el pecado, el orgullo....etc"

Y al fin y al cabo, ¿no es esto lo que ocurre con los Testigos de Jehová?.