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La religión en muchas de sus facetas y manifestaciones han recurrido al sacrificio de algo por su dios, normalmente Dios siempre pide algo, y ¿qué da a cambio? La vida, las lluvias, la comida,..., ¿no tienen estas "provisiones" los que ni siquiera creen en dios, incluso aquellos que son acérrimos enemigos de dios?

El dios del antiguo testamento exigía sacrificios ofrendas algunas que se entienden tenían un propósito, que era sustentar a la clase sacerdotal, por qué dios no recibía nada salvo el incienso, pero todo lo demás se lo comían los levitas y todo el que trabajaba en las labores del tabernáculo/templo.

Llama la atención que alguno de los pasajes estén ligados a sacrificios más consistentes a un a ofrenda de mucho valor para el fervoroso seguidor o adorador, la solicitud o aceptación de sacrificios humanos, Abraham, Ana, Jefte , ejemplifican el grado de disposición de desprendimiento de sus hijos por agradar a dios, este es el recurso ideal de muchas religiones y sectas con relación a las ofrendas.

Los testigos de Jehova han hecho el uso abusivo de los pasajes de la Biblia, para enseñar a sus miembros cuál es la voluntad de dios y en que se complace dios y que lo hace feliz, por qué por el contrario dios se pone triste (que dios tan inestable sentimentalmente ) y lo peor su tristeza se torna en enojo y se pone a destruir ciudades y a matar gente.

Pero para el TJ que como mucha gente tiene la necesidad de creer en un creador y de agradarlo, ese sentimiento es explotado con ese chantaje sentimental, y la WT se ha especializado en no sólo adquirir no sólo los bienes materiales de los feligreses, sino adueñarse de sus vidas, convertirlos en esclavos mentales que no sólo se sacrifican , sino que disfrutan ese sacrificio que otorgan, mientras un segmento disfruta de los beneficios viviendo como reyes a costa de los sacrificios de otras, una clase sacerdotal moderna que se da la libertad de jugar a emisario de dios y poseedor del conocimiento de sus secretos y voluntad, y como siempre la historia se repite.

A donde quiera que volteamos dentro de un salon del reino, vemos a personas "felices" que mientras estén ahí desbordan de alegría a pesar que la estén pasando mal, pero hay que reflejar gozo, contentamiento, estar satisfechos con lo básico, pero nunca es suficiente siempre es necesario dar más, y más, y nunca es suficiente.