[C.R. Rodríguez C.]

El trago de cruda realidad que muchos de esos esclavos removidos de sus prebendas y privilegios(no me refiero a los que de corazón sincero y completo para con Dios, se dedicaron al full time service y ansiaban con fervor, morar en la "Casa de Dios") debió haber sido amargo como el ajenjo, para su inflamado ego a principios de 2016.

Tener que dejar de depender de sus "fieles donantes" y arreglárselas por sí mismos, sin más conocimiento que el poquísimo que hayan adquirido dentro de esa "Casa de Dios"( si es que adquirieron alguno) fue una muy amarga pastilla de UBICATEX, que se la tuvieron que tragar enterita, sin chistar, aunque no lo quisieran, ya que venía de parte de su amo, dueño y señor, La Congregación Cristiana de los TJ.

Espero sinceramente, que esa pastilla de UBICATEX, les haya servido para darse cuenta de la manipulación mental a la que fueron sometidos y hayan adquirido humildad de la buena y verdadera, no de la copia adulterada que ofrece la empresa.

En esos tiempos de necesidad, se demuestra de que está hecho uno, si se levanta o se queda tirado. Todo depende de uno. Y espero que esos hermanos sinceros que si fueron un haber para el cristianismo, que recibieron esa pastilla, hayan despertado y hayan salido adelante con la frente muy en alto.