28 Sep, 2019, 03:39 PM
Hace varios años con los cambios de los viajantes, llegó uno que hizo "amistad" con una familia, la cual le abrió su hogar todos los lunes durante los 3 años que estuvo.
La familia era irregular en sus actividades espirituales, generalmente iban 1 o 2 reuniones al mes, no salian a predicar, pero informaban 1 o 2 horas al mes
Aunque se les trató de ayudar no respondieron a la ayuda.
Pero eso sí, eran muy generosos, Y de eso se colgaron el viajante y su esposa.
Como en su semana de visita, les pasaban el menú de lo que deseaban comer los lunes, siempre buenos guiados.
Y fue en su penúltima visita que nos hizo, que nos pidio que ayudaremos a la familia, porque andaba mal, gustaban de ir a lugares no propios para cristianos y participar veladamente en fiestas no aptas para TJ.
Le comente que se le había dado toda la ayuda necesaria pero no respondían a ella. Y como sabíamos que eran sus amigos, le pedimos que aprovechara, el y su esposa, su amistad con ellos y les ayudaran.
Su respuesta me sorprendio, dijo que no era su obligacion, que era nuestra responsabilidad ayudarlos.
Insistí en que tenía el deber moral de ayudarlos, pero lejos de ceder, puedo haber dicho que si aunque después no lo hiciera, me dio una buena llamada de atencion por que me estaba extralimitando en mis palabras.
Estas situaciones, fueron alimentando mis pensamientos de que algo andaba mal en la organización de Dios.
No podia creer que alguien que por 3 años estuvo comiendo de gorra, no se tomara el tiempo para ayudar a su projimo a quien veian en peligro.
Pero si se tomaban su tiempo para armar un menú delicioso e ir a comer a casa de la fam. X, como si no pasara nada.
La familia era irregular en sus actividades espirituales, generalmente iban 1 o 2 reuniones al mes, no salian a predicar, pero informaban 1 o 2 horas al mes
Aunque se les trató de ayudar no respondieron a la ayuda.
Pero eso sí, eran muy generosos, Y de eso se colgaron el viajante y su esposa.
Como en su semana de visita, les pasaban el menú de lo que deseaban comer los lunes, siempre buenos guiados.
Y fue en su penúltima visita que nos hizo, que nos pidio que ayudaremos a la familia, porque andaba mal, gustaban de ir a lugares no propios para cristianos y participar veladamente en fiestas no aptas para TJ.
Le comente que se le había dado toda la ayuda necesaria pero no respondían a ella. Y como sabíamos que eran sus amigos, le pedimos que aprovechara, el y su esposa, su amistad con ellos y les ayudaran.
Su respuesta me sorprendio, dijo que no era su obligacion, que era nuestra responsabilidad ayudarlos.
Insistí en que tenía el deber moral de ayudarlos, pero lejos de ceder, puedo haber dicho que si aunque después no lo hiciera, me dio una buena llamada de atencion por que me estaba extralimitando en mis palabras.
Estas situaciones, fueron alimentando mis pensamientos de que algo andaba mal en la organización de Dios.
No podia creer que alguien que por 3 años estuvo comiendo de gorra, no se tomara el tiempo para ayudar a su projimo a quien veian en peligro.
Pero si se tomaban su tiempo para armar un menú delicioso e ir a comer a casa de la fam. X, como si no pasara nada.
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