15 Nov, 2019, 10:36 AM
LA CLASE DEL ESCLAVO FIEL Y DISCRETO PODÍA DAR SUGERENCIAS
Por muchos años cualquier miembro que se identificará como parte de la “clase del esclavo” hasta cierto grado podía dar sugerencias sobre asuntos de enseñanza y de organización.
Este punto era un asunto de preocupación para el cuerpo gobernante. Para los que leímos el libro “crisis de conciencia” escrito por Raymond Franz ex miembro de dicha junta directiva, se evidencia una cacería de brujas en el betel de Brooklyn en el que desemboco una serie de expulsiones de betelitas por apostasía a finales de los años 70. Finalmente Raymond Franz hace efectiva su renuncia al cuerpo desde el 22 de mayo de 1980 y en el año 1981 es expulsado de la organización por el “pecado” de almorzar con un des asociado.
https://wol.jw.org/es/wol/d/r4/lp-s/201980332#h=31
(ver ministerio del reino de septiembre de 1980 km 9/80)
La época de los 70 y los 80 para la organización fue un desafío por que cada vez salía de alguna congregación un ungido – es decir, miembro de la clase del esclavo- sacando sus propias conclusiones de su estudio personal de la biblia y que contradecía las enseñanzas del cuerpo gobernante.
El cuerpo gobernante para mitigar un poco el brote de “apostasía” en las congregaciones público en La Atalaya del 1 de septiembre de 1982 paginas 16 al 20 el articulo titulado “Sumisión leal al orden teocrático” en los parrafos 15 al 17 subrayo lo que llamo “la pesadilla del cuerpo gobernante”:
"El esperar en Jehová
15 A veces algunos llaman a la atención de la clase del “esclavo” varios asuntos doctrinales o de organización que ellos creen que deben revisarse. Desde luego, son apropiadas las sugerencias que se dan para mejoras, así como lo son las preguntas que se hacen en busca de esclarecimiento. Un ejemplo de esto fue el caso en que Pablo, Bernabé y otros fueron enviados ‘a subir a los apóstoles y ancianos en Jerusalén’ para tratar el asunto de la circuncisión. Cuando aquellos ancianos de Jerusalén decidieron el asunto, bajo dirección de espíritu santo, entonces enviaron hermanos a varias ciudades para que ‘entregaran a los de allí para que observasen los decretos sobre los cuales habían hecho decisión los apóstoles y ancianos que estaban en Jerusalén.’ La sumisión leal a aquellos decretos trajo la bendición de Jehová. Así, “las congregaciones continuaron haciéndose firmes en la fe y aumentando en número de día en día.”—Hechos 15:1–16:5.
16 El espíritu apropiado que debe desplegarse después de ofrecer sugerencias es el de quedar uno satisfecho con dejar el asunto a la consideración, junto con oración, de los hermanos maduros que dirigen la obra en la organización de Jehová. Pero si los que dan las sugerencias no quedan satisfechos con esto y continúan discutiendo con espíritu de disputa el asunto en las congregaciones con miras a conseguir el apoyo de otros, entonces, ¿qué pudiera suceder? Eso crearía divisiones, y pudiera subvertir la fe de algunos. Por eso Pablo aconseja: “Que vigilen a los que causan divisiones y ocasiones de tropiezo contrario a la enseñanza que ustedes han aprendido, y que los eviten.” Pablo también aconsejó a Tito que ‘censurara a los que contradecían,’ y añadió: “Hay que cerrarles la boca a éstos, puesto que estos mismos hombres siguen subvirtiendo casas enteras, enseñando cosas que no deben ... Por esta misma causa sigue censurándolos con severidad.”—Romanos 16:17, 18; Tito 1:9-13.
17 La Palabra de Dios declara: “El conocimiento hincha, pero el amor edifica.” (1 Corintios 8:1) Por eso, ¡cuánto mejor es mantenerse uno ocupado en la obra principal de proclamar el maravilloso reino de Dios, hablar de cosas edificantes, fortalecer la fe de otros y la suya, mientras espera con paciencia que Jehová efectúe Su voluntad mediante Su conducto nombrado! (Romanos 14:19; Filipenses 4:8, 9) Imite a David cuando dijo: “Porque a ti, oh Jehová, esperé; tú mismo procediste a responder, oh Jehová Dios mío.” (Salmo 38:15) Siempre tenga presente lo que es importante, según lo declaró Pablo, a saber, “que todos hablen de acuerdo, y que no haya divisiones entre ustedes, sino que estén aptamente unidos en la misma mente y en la misma forma de pensar.” (1 Corintios 1:10) Debido a que este principio se está aplicando en la familia de Jehová por todo el mundo, vemos resultados maravillosos. En efecto, “¡cuán bueno y cuán agradable es que los hermanos moren juntos en unidad!”—Salmo 133:1. "
https://wol.jw.org/es/wol/l/r4/lp-s?q=w82+1%2F9+20
(Ver La Atalaya del 1 de septiembre de 1982 páginas 16 al 20; w82 1/9 20)
Estos párrafos se evidencia “el dolor de cabeza” del cuerpo gobernante y dan a entender que cualquier ungido puede hacer sugerencia de doctrina y organización- tal vez escribiendo cartas directamente a la sede mundial- pero se les invita a que no “ventilen” sus hallazgos bíblicos, doctrinales o de tipo organizativo a los hermanos para no causar divisiones. En conclusión, le invita al ungido que mejor se centren en predicar y que se queden bien callados.
Y es que tiene mas influencia sobre uno, un hermano ungido que veo cada semana en mi congregación, que a un grupo de ungidos que ni conozco, que están sentados en un escritorio en la sede mundial.
Para un publicador promedio el tener un ungido en su congregación es un privilegio y si es un “hermano de cristo” pues bienvenida su enseñanza.
Hasta el momento, el cuerpo gobernante sentía que tenia todo bajo control, pero llegaría el momento en que la doctrina de la “clase del esclavo fiel y discreto” se le saldría de las manos.
continuara...
Por muchos años cualquier miembro que se identificará como parte de la “clase del esclavo” hasta cierto grado podía dar sugerencias sobre asuntos de enseñanza y de organización.
Este punto era un asunto de preocupación para el cuerpo gobernante. Para los que leímos el libro “crisis de conciencia” escrito por Raymond Franz ex miembro de dicha junta directiva, se evidencia una cacería de brujas en el betel de Brooklyn en el que desemboco una serie de expulsiones de betelitas por apostasía a finales de los años 70. Finalmente Raymond Franz hace efectiva su renuncia al cuerpo desde el 22 de mayo de 1980 y en el año 1981 es expulsado de la organización por el “pecado” de almorzar con un des asociado.
https://wol.jw.org/es/wol/d/r4/lp-s/201980332#h=31
(ver ministerio del reino de septiembre de 1980 km 9/80)
La época de los 70 y los 80 para la organización fue un desafío por que cada vez salía de alguna congregación un ungido – es decir, miembro de la clase del esclavo- sacando sus propias conclusiones de su estudio personal de la biblia y que contradecía las enseñanzas del cuerpo gobernante.
El cuerpo gobernante para mitigar un poco el brote de “apostasía” en las congregaciones público en La Atalaya del 1 de septiembre de 1982 paginas 16 al 20 el articulo titulado “Sumisión leal al orden teocrático” en los parrafos 15 al 17 subrayo lo que llamo “la pesadilla del cuerpo gobernante”:
"El esperar en Jehová
15 A veces algunos llaman a la atención de la clase del “esclavo” varios asuntos doctrinales o de organización que ellos creen que deben revisarse. Desde luego, son apropiadas las sugerencias que se dan para mejoras, así como lo son las preguntas que se hacen en busca de esclarecimiento. Un ejemplo de esto fue el caso en que Pablo, Bernabé y otros fueron enviados ‘a subir a los apóstoles y ancianos en Jerusalén’ para tratar el asunto de la circuncisión. Cuando aquellos ancianos de Jerusalén decidieron el asunto, bajo dirección de espíritu santo, entonces enviaron hermanos a varias ciudades para que ‘entregaran a los de allí para que observasen los decretos sobre los cuales habían hecho decisión los apóstoles y ancianos que estaban en Jerusalén.’ La sumisión leal a aquellos decretos trajo la bendición de Jehová. Así, “las congregaciones continuaron haciéndose firmes en la fe y aumentando en número de día en día.”—Hechos 15:1–16:5.
16 El espíritu apropiado que debe desplegarse después de ofrecer sugerencias es el de quedar uno satisfecho con dejar el asunto a la consideración, junto con oración, de los hermanos maduros que dirigen la obra en la organización de Jehová. Pero si los que dan las sugerencias no quedan satisfechos con esto y continúan discutiendo con espíritu de disputa el asunto en las congregaciones con miras a conseguir el apoyo de otros, entonces, ¿qué pudiera suceder? Eso crearía divisiones, y pudiera subvertir la fe de algunos. Por eso Pablo aconseja: “Que vigilen a los que causan divisiones y ocasiones de tropiezo contrario a la enseñanza que ustedes han aprendido, y que los eviten.” Pablo también aconsejó a Tito que ‘censurara a los que contradecían,’ y añadió: “Hay que cerrarles la boca a éstos, puesto que estos mismos hombres siguen subvirtiendo casas enteras, enseñando cosas que no deben ... Por esta misma causa sigue censurándolos con severidad.”—Romanos 16:17, 18; Tito 1:9-13.
17 La Palabra de Dios declara: “El conocimiento hincha, pero el amor edifica.” (1 Corintios 8:1) Por eso, ¡cuánto mejor es mantenerse uno ocupado en la obra principal de proclamar el maravilloso reino de Dios, hablar de cosas edificantes, fortalecer la fe de otros y la suya, mientras espera con paciencia que Jehová efectúe Su voluntad mediante Su conducto nombrado! (Romanos 14:19; Filipenses 4:8, 9) Imite a David cuando dijo: “Porque a ti, oh Jehová, esperé; tú mismo procediste a responder, oh Jehová Dios mío.” (Salmo 38:15) Siempre tenga presente lo que es importante, según lo declaró Pablo, a saber, “que todos hablen de acuerdo, y que no haya divisiones entre ustedes, sino que estén aptamente unidos en la misma mente y en la misma forma de pensar.” (1 Corintios 1:10) Debido a que este principio se está aplicando en la familia de Jehová por todo el mundo, vemos resultados maravillosos. En efecto, “¡cuán bueno y cuán agradable es que los hermanos moren juntos en unidad!”—Salmo 133:1. "
https://wol.jw.org/es/wol/l/r4/lp-s?q=w82+1%2F9+20
(Ver La Atalaya del 1 de septiembre de 1982 páginas 16 al 20; w82 1/9 20)
Estos párrafos se evidencia “el dolor de cabeza” del cuerpo gobernante y dan a entender que cualquier ungido puede hacer sugerencia de doctrina y organización- tal vez escribiendo cartas directamente a la sede mundial- pero se les invita a que no “ventilen” sus hallazgos bíblicos, doctrinales o de tipo organizativo a los hermanos para no causar divisiones. En conclusión, le invita al ungido que mejor se centren en predicar y que se queden bien callados.
Y es que tiene mas influencia sobre uno, un hermano ungido que veo cada semana en mi congregación, que a un grupo de ungidos que ni conozco, que están sentados en un escritorio en la sede mundial.
Para un publicador promedio el tener un ungido en su congregación es un privilegio y si es un “hermano de cristo” pues bienvenida su enseñanza.
Hasta el momento, el cuerpo gobernante sentía que tenia todo bajo control, pero llegaría el momento en que la doctrina de la “clase del esclavo fiel y discreto” se le saldría de las manos.
continuara...
"¿Para qué andar buscando tantas misiones si la única misión que tiene el ser humano es ser feliz?"
Don Lauro de la Cruz