[YuriGagarin]

Qué experiencia más triste YuriGagarin, en verdad los horarios de las reuniones eran de las cosas que más estrés me provocaban cuando estaba en la secta y me hiciste volver a revivir esos sentimientos con tu relato, que era prácticamente al igual que la tuya, mi misma experiencia con las reuniones. Saludos desde Hermosillo, Sonora, México.

Muchos años despues de salir de la secta, pense mucho sobre el porque de esos horarios tan asfixiantes, y el porque de tantas reuniones cada semana.

Y di con una conclusion: La razon de tanta presion de reuniones es la siguiente: Cuando no estas trabajando en tu trabajo seglar, tienes que dedicar todo tu tiempo libre o a pensar en la reunion del dia o en preparar la reunion del dia siguiente. De esa manera, no tienes tiempo fisico como para dedicar el cerebro a nada que no sea eso: reunion y actividades de "La Empresa".

Recuerdo que en mi caso, el unico dia de la semana que podia dedicar integramente "a mi" eran los miercoles. Los miercoles eran mis dias preferidos, salia con mis amigos a practicar BMX y era feliz.

Los lunes preparabamos la reunion del martes, los martes reunion. Miercoles, mas o menos libre... o estudio personal, . Jueves, preparar la reu del viernes. Viernes, reu. Sabado, gastar suelas por la calle y por la tarde preparar la reu del domingo. Domingo por la mañana... descansar un poco y despues, reu, a dormir y el lunes repetir la jugada de nuevo.

Era horrible.
En otro tipo de "Empresas Religiosas" no se exigen esos niveles de absorcion de tiempo.

Pero saben bien los del CG que en mente cerrada no entran moscas y si tienes el cerebro absorbido todo el tiempo en esto, ni tienes tiempo de cuestionar nada, ni de aprender otras cosas ni de nada mas que no sea el comecocos. De esa forma, estando todo el dia absorbido en el comecocos, con un circulo de personas con el cerebro lavado y blanqueado con lejia wachtoweriana, es casi imposible salir del circulo.

Y los que salimos, ya sabemos como salimos. Repudiados y por la puerta de atras en una gran mayoria. Los pocos que hemos salido mas o menos indemnes, tenemos que tener claro que hemos tenido una suerte tremenda de mantener a nuestras familias mas o menos a nuestro lado.