21 Mar, 2023, 09:53 AM
Buena reflexión y pregunta, Charles. Se nota que meditas mucho las cosas, y eso es de admirar.
Imagino que nadie, si es sincero y no está atrapado en una secta mental, permanece igual siempre. Vamos fluyendo con la vida, la experiencia subjetiva y las decepciones de todo tipo. Pero me he dado cuenta de que los seres humanos adolecemos de puntos ciegos parecidos a los que encontramos al conducir un vehículo en la carretera. Por muy buenos conductores que seamos, todo puede acabar en desastre por no estar atentos a nuestra forma de conducir y subestimar estos puntos ciegos.
Tres puntos ciegos básicos y confirmados por la ciencia de los que adolecemos los seres humanos son:
1. Los seres humanos sufrimos de amnesia crónica. Olvidamos con facilidad que nos hicieron daño y quienes lo hicieron. Esto nos hace fácilmente manipulables por personas que están en posiciones de poder. Es por esto que seguimos votando a partidos políticos que ya nos hicieron daño en el pasado, con la excusa del mal menor. Mejor malo conocido, que bueno por conocer. Lo que nos lleva al segundo punto.
2. Los seres humanos somos conservadores por naturaleza. Si nos cambian más de la cuenta una circunstacia social, cultural, religiosa, nos vamos a rebelar y evitaremos el cambio a toda costa. Esto también nos hace más débiles a gente extremista que ceba nuestro miedo al cambio, ya sea en forma de partidos políticos radicales, sectas o movimientos que nos garantizen que vamos a estar bien, en cualquier situación. Esto es mentira, por supuesto, pero es un mensaje que tranquiliza a nuestras mentes conservadoras. Lo que nos lleva al tercer y último punto ciego.
3. Los seres humanos buscamos y fomentamos el autoengaño. Creemos que somos buscadores de la verdad, pero no es cierto. Buscamos mensajes que alivien nuestros conflictos internos, nuestros sentimientos de culpa, y pagamos si es necesario para que no nos cuenten jamás la verdad. Matamos por no escuchar la verdad. Las sociedades se basan en el autoengaño, de ahí surgen los eufemismos para no llamar a las cosas por su nombre. El patriotismo, para no ver las miserias sobre las que se ha fundado cada nación. Los dogmas de fe, para no cuestionar las equivocaciones y engaños sobre los que estos se basan, etc, etc, etc.
Teniendo en cuenta estos tres puntos ciegos, ¿alguien sería capaz de encontrar la verdad sobre nosotros mismos cuando siquiera habrá una generación que no haya pervertido la realidad para que encaje con sus objetivos a corto plazo de supervivencia?
Ahí tenemos la destrucción de la Biblioteca de Alejandría, los libros "canónicos" de la Biblia, el "Mein Kamp" de los hebreos conocido como el antiguo testamento, la perversión del mensaje de Jesús de Nazaret por sus propios "seguidores", la invasión de Irak porque había "armas de destrucción masiva", y seguiremos así si no nos damos cuenta de los animales tan estúpidos que somos, y que cualquier conclusión a la que lleguemos habremos de cogerla con pinzas, porque al final recorremos un campo de minas intelectual.
Imagino que nadie, si es sincero y no está atrapado en una secta mental, permanece igual siempre. Vamos fluyendo con la vida, la experiencia subjetiva y las decepciones de todo tipo. Pero me he dado cuenta de que los seres humanos adolecemos de puntos ciegos parecidos a los que encontramos al conducir un vehículo en la carretera. Por muy buenos conductores que seamos, todo puede acabar en desastre por no estar atentos a nuestra forma de conducir y subestimar estos puntos ciegos.
Tres puntos ciegos básicos y confirmados por la ciencia de los que adolecemos los seres humanos son:
1. Los seres humanos sufrimos de amnesia crónica. Olvidamos con facilidad que nos hicieron daño y quienes lo hicieron. Esto nos hace fácilmente manipulables por personas que están en posiciones de poder. Es por esto que seguimos votando a partidos políticos que ya nos hicieron daño en el pasado, con la excusa del mal menor. Mejor malo conocido, que bueno por conocer. Lo que nos lleva al segundo punto.
2. Los seres humanos somos conservadores por naturaleza. Si nos cambian más de la cuenta una circunstacia social, cultural, religiosa, nos vamos a rebelar y evitaremos el cambio a toda costa. Esto también nos hace más débiles a gente extremista que ceba nuestro miedo al cambio, ya sea en forma de partidos políticos radicales, sectas o movimientos que nos garantizen que vamos a estar bien, en cualquier situación. Esto es mentira, por supuesto, pero es un mensaje que tranquiliza a nuestras mentes conservadoras. Lo que nos lleva al tercer y último punto ciego.
3. Los seres humanos buscamos y fomentamos el autoengaño. Creemos que somos buscadores de la verdad, pero no es cierto. Buscamos mensajes que alivien nuestros conflictos internos, nuestros sentimientos de culpa, y pagamos si es necesario para que no nos cuenten jamás la verdad. Matamos por no escuchar la verdad. Las sociedades se basan en el autoengaño, de ahí surgen los eufemismos para no llamar a las cosas por su nombre. El patriotismo, para no ver las miserias sobre las que se ha fundado cada nación. Los dogmas de fe, para no cuestionar las equivocaciones y engaños sobre los que estos se basan, etc, etc, etc.
Teniendo en cuenta estos tres puntos ciegos, ¿alguien sería capaz de encontrar la verdad sobre nosotros mismos cuando siquiera habrá una generación que no haya pervertido la realidad para que encaje con sus objetivos a corto plazo de supervivencia?
Ahí tenemos la destrucción de la Biblioteca de Alejandría, los libros "canónicos" de la Biblia, el "Mein Kamp" de los hebreos conocido como el antiguo testamento, la perversión del mensaje de Jesús de Nazaret por sus propios "seguidores", la invasión de Irak porque había "armas de destrucción masiva", y seguiremos así si no nos damos cuenta de los animales tan estúpidos que somos, y que cualquier conclusión a la que lleguemos habremos de cogerla con pinzas, porque al final recorremos un campo de minas intelectual.
Cada persona que conocerás sabe algo que tú no.