20 Dec, 2018, 06:44 AM
Saludos a todos.
Desde que ingresé a la secta, ya unas tres décadas atrás, me llamaba la atención el tema de los "ungidos". Al inicio, me dijeron que eran personas "muy espirituales", que todos los ungidos pensaban lo mismo con relación a las doctrinas de la wachtower, y que eran "el esclavo fiel y discreto". Luego, al pasar el tiempo, conocí de cerca a dos " ungidos", que me decepcionaron terriblemente. Uno era muy dogmático y prejuzgador y el otro, un tipo muy indiscreto en su hablar, le gustaba invitarse sólo a comer a casa de los hermanos, y sus discursos eran de paporreta, muy redundantes. El asunto es que los hermanos en las congregaciones a donde llegaban, porque les gustaba "apoyar el Reino" en varias congregaciones, les tenían mucho respeto porque eran "ungidos". Mi desconcierto y decepción se tranquilizó un poco cuando en un estudio de la atalaya de dijo que algunos que se creen "ungidos", en realidad tienen problemas mentales. Qué experiencia han tenido ustedes al respecto?
Gracias por comentar.
Desde que ingresé a la secta, ya unas tres décadas atrás, me llamaba la atención el tema de los "ungidos". Al inicio, me dijeron que eran personas "muy espirituales", que todos los ungidos pensaban lo mismo con relación a las doctrinas de la wachtower, y que eran "el esclavo fiel y discreto". Luego, al pasar el tiempo, conocí de cerca a dos " ungidos", que me decepcionaron terriblemente. Uno era muy dogmático y prejuzgador y el otro, un tipo muy indiscreto en su hablar, le gustaba invitarse sólo a comer a casa de los hermanos, y sus discursos eran de paporreta, muy redundantes. El asunto es que los hermanos en las congregaciones a donde llegaban, porque les gustaba "apoyar el Reino" en varias congregaciones, les tenían mucho respeto porque eran "ungidos". Mi desconcierto y decepción se tranquilizó un poco cuando en un estudio de la atalaya de dijo que algunos que se creen "ungidos", en realidad tienen problemas mentales. Qué experiencia han tenido ustedes al respecto?
Gracias por comentar.
