[Charles Fiasco Rusell]

Así es, a los varones se nos inculca el deseo y la ambición de escalar puestos dentro de la secta, claro, disfrazado de supuesto servicio sagrado.

Para esto se valen de la frase bíblica "probar en cuanto a aptitud", una frase ambigua que los ancianos explotan de acuerdo a su criterio. Probar a alguien en cuanto a aptitud puede implicar un sinfín de cosas, y el varón se siente obligado y motivado a hacer todo lo que se le pida para mostrar que es un candidato apto para siervo ministerial o ancianete.

Muy pocas veces este probar aptitud es provechoso, alguna que otra vez puede servir realmente para ayudar a cuidar de alguien que está enfermo, cooperar para las medicinas de un hermano, etc. Pero la mayoría de las veces consiste en sacar provecho del candidato en turno, para que dé de su tiempo, energías y dinero a la secta.

¿No logran llenar espacios para las comidas del vago de circuito? Hay que ofrecerle a un candidato cubrir algún espacio, y seguro lo hará, aunque tenga que comprometerse y someter a tensión a toda su familia para complacer al pedigueño en curso.

El probar en cuanto a aptitud también sirve para que los ancianetes se libren de toda aquella actividad que no quieran realizar, por ejemplo: sacar el grupo a predicar para que el ancianete no llegue desmañanado a la predicación, ir a velar para cuidar los salones de asamblea e instalaciones teocráticas, a mi papá le tocó hacer espacio en su casa y prescindir de su habitación para hospedar supermantenidos de circuito y delegados de asambleas regionales.

Algunos ancianos son más caraduras y descaradamente se auto invitan a comer a casas de los hermanos o exponen a algún candidato en turno su necesidad, esperando que el hermanillo le ayude.

¿Cómo se aprovecharon de tu deseo por ser siervo nombrado? ¿Cómo percibiste que se aprovecharon de los demás?