[C.R. Rodríguez C.]

¡¡Sí que fueron muy embarazosos los momentos esos, pero siempre le di al mal tiempo, buena cara!!

Recuerdo que iba con mi hijo mayor aplanando calles , él tendría como 12 años, hicimos arreglos para salir en la predicación vespertina. Tocamos la puerta y ¡¡oh sorpresa!! En la puerta nos recibió la maestra de kinder de mi hijo, que también fue vecina mía de cuando éramos niños(ella vivía enfrente de mi casa), le tocaba hablar a él y me echó una mirada de no saber qué hacer. Le dije, haciéndole también una seña con la mano: ¡Adelante! yo igual que mi hijo, sorprendido y muerto de vergüenza de que ella pensara que estaba obligando a mi hijo a hacer algo que no quería y me iba a echar a las autoridades por maltrato infantil

Total, mi hijo también le dio al mal tiempo buena cara, le dio el mensaje, ella lo felicitó y pues ahí quedó el asunto: En un momento sumamente embarazoso y vergonzoso, aunque luego quise darle la vuelta hacia lo teocrático(aunque yo no estaba muy convencido de lo que nos decían de darle el testimonio a nuestros conocidos y menos si no me lo pedían)diciéndole a mi hijo como buen Pericles, lo que la empresa nos dictaba decir en esos casos, encomiar al pobre chamaco por el susto pasado pero que Diosito estaba muy feliz de lo que había hecho. Saludos desde Hermosillo, Sonora, México.