17 Jan, 2021, 08:35 AM
Es la diferencia entre el conocimiento superficial del que "conoció la verdad" como breve estudiante, o hijo de testigos que pronto dejó la secta SIN BAUTIZARSE; y el que se bautizó.
La posición es radicalmente distinta.
El primero apenas recuerda vivencias, todas ellas positivas. Y "enseñanzas" deseables.
Recibió un trato amable, "amorosas invitaciones", fácilmente confundible con verdaderos buenos motivos. Se quedó apenas en el "love bombing".
No sufrió ningún daño, siempre fue dueño de sí mismo y mantiene un recuerdo idealizado. Apenas nunca sintió la disonancia cognitiva.
En resumen, NI SE ENTERÓ DE DÓNDE ESTABA, de que nadaba en aguas repletas de pirañas pero ninguna le mordió.
El bautizado por otra parte llega a ser parte de la maquinaria, se convierte en un robot que DEBE olvidarse de sí mismo, DEBE agachar la cabeza, DEBE luchar contra sí mismo, contra sus legítimas metas como ser humano, y haciendo alarde de la "profunda felicidad" que ese cautiverio le "debe" traer. Todo eso, bajo estrecha vigilancia.
Y si no lo hace recibe consejo firme, regañinas y castigo psicológico, emocional y moral.
Eso a veces se prolonga por años.
Y su calvario empieza cuando por razones X de da cuenta del fraude. De ahí en adelante su vida se convierte poco menos que en un infierno.
Tu jefe, estimado Perceptivo, no tiene ni idea de lo que dice.
La posición es radicalmente distinta.
El primero apenas recuerda vivencias, todas ellas positivas. Y "enseñanzas" deseables.
Recibió un trato amable, "amorosas invitaciones", fácilmente confundible con verdaderos buenos motivos. Se quedó apenas en el "love bombing".
No sufrió ningún daño, siempre fue dueño de sí mismo y mantiene un recuerdo idealizado. Apenas nunca sintió la disonancia cognitiva.
En resumen, NI SE ENTERÓ DE DÓNDE ESTABA, de que nadaba en aguas repletas de pirañas pero ninguna le mordió.
El bautizado por otra parte llega a ser parte de la maquinaria, se convierte en un robot que DEBE olvidarse de sí mismo, DEBE agachar la cabeza, DEBE luchar contra sí mismo, contra sus legítimas metas como ser humano, y haciendo alarde de la "profunda felicidad" que ese cautiverio le "debe" traer. Todo eso, bajo estrecha vigilancia.
Y si no lo hace recibe consejo firme, regañinas y castigo psicológico, emocional y moral.
Eso a veces se prolonga por años.
Y su calvario empieza cuando por razones X de da cuenta del fraude. De ahí en adelante su vida se convierte poco menos que en un infierno.
Tu jefe, estimado Perceptivo, no tiene ni idea de lo que dice.
"La VERDAD se descubre; la MENTIRA se construye"