08 Mar, 2024, 02:58 PM
Recuerdo en cierta ocasión,( hace unos años atras, cuando era TJ), estaba en el metro de Medellin, dirigiendome hacia mi trabajo y me encontre con un hermano de una congregación y empezamos a dialogar. En medio del dialogo, mi ego, saco a relucir el tema de sentirse priviligiado por ser parte de "la verdad" y ser seleccionado o apartado de entre multitudes por Jehová (el dios verdadero) para ser parte de su "pueblo".
Recuerdo que le dije algo como:
" Si te pones a pensar cuantas personas son Testigos de jehová en este vagón y en el tren completo, te vas a dar cuenta que se pueden contar con los dedos de las manos."
Yo veía aquellas personas de mi alrededor con lastima, personas perdidas, con vidas sin propósito o sentido. Era como si estuviera en una posición superior a los demás. Esto realmente alimentaba mi ego y me daba ínfulas de superioridad moral, como si fuera un ungido o un iluminado.
Es muy fácil caer en este tipo de "trampa", de sentirse superior a los demás por temas de religión, política o estatus social. Ya crees que tu camino es el único y es el verdadero, cuando todos, en este mundo somos aprendices, y estamos tratando de hallar los mecanismo para ser felices.
Escoge el camino que te plazca, el que tu intuición o tu corazón te dicte.
Sin importar el camino que cada individuo tome, estoy convencido que cada ser humano trata de hacer lo mejor que puede, con las herramientas y recursos que tiene. Como somos exploradores en este mundo, es probable que tomemos senderos que no nos convienen, que nos incomoden o nos cause dolor, pero todo hace parte del proceso de tu desarrollo personal.
En este juego de la vida siempre tendremos la posibilidad en la marcha, de rectificar, de crear o quedarnos en el mismo sendero, si nos place. No hay caminos buenos y malos, solo hay un aprendizaje.
Recuerda que la vida es un viaje, no es un destino.
Recuerdo que le dije algo como:
" Si te pones a pensar cuantas personas son Testigos de jehová en este vagón y en el tren completo, te vas a dar cuenta que se pueden contar con los dedos de las manos."
Yo veía aquellas personas de mi alrededor con lastima, personas perdidas, con vidas sin propósito o sentido. Era como si estuviera en una posición superior a los demás. Esto realmente alimentaba mi ego y me daba ínfulas de superioridad moral, como si fuera un ungido o un iluminado.
Es muy fácil caer en este tipo de "trampa", de sentirse superior a los demás por temas de religión, política o estatus social. Ya crees que tu camino es el único y es el verdadero, cuando todos, en este mundo somos aprendices, y estamos tratando de hallar los mecanismo para ser felices.
Escoge el camino que te plazca, el que tu intuición o tu corazón te dicte.
Sin importar el camino que cada individuo tome, estoy convencido que cada ser humano trata de hacer lo mejor que puede, con las herramientas y recursos que tiene. Como somos exploradores en este mundo, es probable que tomemos senderos que no nos convienen, que nos incomoden o nos cause dolor, pero todo hace parte del proceso de tu desarrollo personal.
En este juego de la vida siempre tendremos la posibilidad en la marcha, de rectificar, de crear o quedarnos en el mismo sendero, si nos place. No hay caminos buenos y malos, solo hay un aprendizaje.
Recuerda que la vida es un viaje, no es un destino.
"¿Para qué andar buscando tantas misiones si la única misión que tiene el ser humano es ser feliz?"
Don Lauro de la Cruz