25 Jul, 2024, 08:21 AM
Cuando mi hijo mayor llego a la adolescencia se hizo rebelde a su manera, pues solo se rebelaba de cosas que le convenian, como no ir a las reuniones o la predicacion. Mi esposa que tiene un caracter muy fuerte lograba revertir su conducta a cambio de infundirle un temor pánico, nadie queria ver a mama enojada en casa. En mi caso, las veces que me toco lidiar con el, no le reprochaba nada pero yo tenia mi estilo para corregirlo. Si el queria quedarse en casa para no ir a las reuniones o la predicacion le daba la razon pero le tenia que dejar asignaciones en casa mientras estabamos fuera, cada una mas pesada o complicada que la otra, asi, le asigne limpiar la casa, lavar la ropa, ordenar los dormitorios, dejar listo las cosas para el almuerzo o cena (hasta ahora el odia cocinar), podar el cesped, bañar al perro y asi, todo tenia que hacerlo en 2 horas y el no cumplirlo implicaba que se quedaria sin mesada. Dos semanas despues de estas asignaciones era el primero que nos decia Vamos a la predi??
Confieso que no logre desprogramarlo y ahora hasta sirve remotamente en el Betel de su nuevo pais junto con su esposa.
Esa experiencia me enseño que debemos respetar el espacio y momento de nuestros hijos, no imponerles nada de lo que no quieren hacer porque luego luego pueden terminar volviendose mas fanaticos que uno y hasta servir en Betel.
Confieso que no logre desprogramarlo y ahora hasta sirve remotamente en el Betel de su nuevo pais junto con su esposa.
Esa experiencia me enseño que debemos respetar el espacio y momento de nuestros hijos, no imponerles nada de lo que no quieren hacer porque luego luego pueden terminar volviendose mas fanaticos que uno y hasta servir en Betel.
Pablo, apostol del mundo libre