[Charles Fiasco Rusell]

La revista La Atalaya, órgano oficial de los testigos de Jehová, ha publicado recientemente un artículo titulado ¿Trata usted a las mujeres como lo hace Jehová?, en el que se pretende defender el trato que la Organización da a las mujeres dentro de su estructura religiosa.

Sin embargo, una lectura crítica del artículo revela que se trata de un intento fallido de ocultar la discriminación y el sometimiento que sufren las mujeres testigos de Jehová en todos los ámbitos de su vida. A pesar de que las mujeres son mayoría entre los miembros de esta secta, su papel se reduce a obedecer, callar y servir a los hombres, sin tener voz ni voto en las decisiones que afectan a su propia fe, familia y futuro. El artículo se basa en unos pocos versículos bíblicos seleccionados para exhortar a los hombres a escuchar, confiar y respetar a las mujeres testigos (¡como debe ser!), pero no reconoce (no, eso NUNCA sucederá) el papel marginal y subordinado que históricamente han tenido en esa religión. El artículo ignora las evidencias de que las mujeres testigos de Jehová no pueden ejercer ningún cargo de autoridad ni enseñanza dentro de la congregación, ni siquiera orar en público sin cubrirse la cabeza, como si fueran inferiores o indignas ante Dios y los ángeles. El artículo tampoco aborda los graves problemas que enfrentan las mujeres testigos de Jehová cuando son víctimas de violencia doméstica, abuso sexual o divorcio, ya que la Organización les impone un código de conducta basado en la sumisión, el silencio y la culpa*. ¿Es eso lo que se esperaría de un Dios justo e imparcial que dotó de la misma inteligencia y capacidades a hombres y mujeres? ¿Qué razón realmente válida y comprensible existiría para seguir defendiendo una congregación patriarcal en estos tiempos? ¿Por qué no puede dirigir, enseñar o al menos orar una mujer en presencia de un hombre? ¿De verdad se ofendería Dios y ángeles súper poderosos en el cielo porque una mujer haga esto sin que tenga que ‘cubrir’ su cabeza si lo hace delante de un hombre?

Es incomprensible que estas preguntas no tengan respuestas en estos momentos y es muy lamentable que miles de mujeres tengan que leer un artículo como este en el que tratan de limpiar su imagen de machistas pero no hacen más que generar más dudas por su actuar.

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* Hay que aclarar que quizá no de manera tácita pero si de una forma que insta a esperar a que Jehová ‘mueva los asuntos’, que no es otra manera de permitir que pocas veces pase algo.

Deberían agregar al artículo citas que han hecho en anteriores publicaciones, como aquella de que el cerebro de la mujer tiene menos capacidad cerebral que el del hombre, la de que la mujer debe serle sumisa y no solo fiel porque ser fiel hasta un perro lo es; o que tal aquella para victimas de abuso sexual que deben tener comprensión por su abusador y recordar que es un humano débil